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El objetivo del gobierno para el próximo año es aumentar las reservas de petróleo del país que actualmente alcanzan para 7 años. | Foto: DIDIMO CARVAJAL/ECOPETROL

MINERO-ENERGÉTICO

Con menos velocidad

El sector seguirá liderando la economía, pero probablemente creciendo a menor ritmo. Los vientos externos y preocupaciones internas le harían perder fuerza.

24 de noviembre de 2012

El sector minero-energético tendrá una prueba de fuego el año entrante. A pesar de que las grandes apuestas están alrededor de esta locomotora, debido al aumento de la inversión extranjera directa que supera los 5.000 millones de dólares al año, en los últimos meses la situación ha dado un giro ante el descenso en los precios internacionales, lo que puede bajarle el volumen a una fiesta que apenas estaba comenzando. Las razones tienen que ver con la crisis de Europa, la débil recuperación de Estados Unidos y la eventual desaceleración de China. En el frente local, hay preocupaciones entre los inversionistas por temas de impuestos y licencias ambientales que podría frenar el auge del sector.

La meta del millón de barriles diarios de petróleo no se ha podido cumplir, aunque el gobierno cree que la alcanzará en 2013. En cuanto al carbón, del que Colombia es cuarto productor mundial, los pronósticos del gobierno tampoco se han cumplido. Para este año no se logrará la meta de los 97 millones de toneladas.

En materia de precios hay mucha incertidumbre. El barril de petróleo, que a comienzos del año estuvo por encima de los 100 dólares, hoy está en 85. Analistas del Credit Suisse y el Deutsche Bank elevaron sus pronósticos a 104 dólares para el WTI, de referencia para Estados Unidos. Pero el Commerzbank prevé un descenso porque considera que el alza de los últimos meses se produjo por factores temporales especiales y no por una estrechez en el mercado. En carbón el descenso en los precios es de 35 por ciento -se pasó de 120 dólares la tonelada a 80 -, lo que ha tenido un impacto negativo en la producción.

Los precios de estos productos son un tema neurálgico porque incidirán en el nuevo esquema de regalías estrenado este año, cuyos resultados se verán a partir del año entrante. Si hay menores regalías volverá a despertar el malestar en regiones productoras que vieron recortados sus recursos. Roberto Junguito, presidente de El Cerrejón, la principal productora de carbón, dijo que hay que aterrizar la euforia minera porque si se mantienen los precios a la baja el impacto en las finanzas públicas será considerable.

El gobierno hace énfasis en buscar más petróleo. El ministro de Minas y Energía, Federico Renjifo, dice que hay que aumentar el nivel de reservas del país que actualmente alcanza para siete años. "Me trasnocha más aumentar las reservas que alcanzar el millón de barriles". Para lograr este objetivo se reforzará el plan de exploración para que las reservas alcancen para diez años o más. Este año se llegará a una cifra récord de 150 pozos explorados y para 2013 se espera una cifra similar tras la adjudicación de 49 bloques de los 115 que la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) tenía previstos en la ronda Colombia, en la que por primera vez participaron compañías petroleras de China e India y retornaron multinacionales como Shell y ExxonMobil. Con la adjudicación de estos bloques se esperan inversiones por 2.600 millones de dólares el año entrante.

En minería uno de los grandes desafíos es controlar la ilegalidad, que está causando graves daños económicos, sociales y ambientales. La minería legal está pendiente de las decisiones en materia de impuestos y de que se agilice la aprobación de las licencias ambientales y las consultas con las comunidades que tienen paralizados grandes proyectos. Otro de los temas cruciales es la aprobación del nuevo código minero en el Congreso de la República, que será la hoja de ruta del sector para los próximos años.