El mínimo será más sufrido

Negociar el incremento del salario mínimo nunca ha sido fácil, pero el de 2010 pinta aun más difícil que los de años anteriores. Esta semana, cuando se sienten nuevamente a la mesa los trabajadores y empresarios, se van a encontrar con dos cifras que hacen más compleja la negociación: la inflación con la que termina 2009, alrededor del 3 por ciento, que es la más baja en la historia del país, y la meta del año entrante, también del 3 por ciento, que fijó el Banco de la República. Nunca se había partido de una base tan baja. Aunque una inflación de este nivel es una excelente noticia para todo el mundo, un aumento del salario mínimo del 3 por ciento, como comenzó a mencionarse, tiene a los trabajadores echando chispas. Tarsicio Mora, presidente de la CUT, anticipó que la petición de las centrales será de IPC (es decir la inflación) más 5 puntos, lo que daría un incremento del 8 por ciento. Algunos gremios han dicho que con la desaceleración de la economía, el incremento debe quedarse en 3 por ciento. Analistas económicos creen que el aumento se moverá entre 4 y 5 por ciento. Queda un mes más para negociar.