El nuevo rico

Manejar 1.800 restaurantes y más de 100.000 empleados en América Latina es un reto que asumió un colombiano, paisa, para más señas, que fue incluido este año en la exclusiva lista de los 1.226 multimillonarios del mundo que elabora la revista Forbes.

Para estar en este privilegiado club, Woods Staton ha trabajado intensamente durante tres décadas en McDonald's, la principal compañía de comidas rápidas del mundo, que hoy tiene presencia en más de 100 países y que se ha convertido en la referencia obligada cuando se habla de este sector. El empresario es el presidente y director ejecutivo de Arcos Dorados, la firma que tiene la franquicia de McDonald's para América Latina.

Hoy está en el puesto número 764 en la lista de multimillonarios, con una fortuna personal de 1.700 millones de dólares, convirtiéndose en el tercer colombiano de este selecto grupo. Aunque en Colombia su nombre no es muy conocido, sí lo es en Argentina, donde está radicado, así como en la mayoría de países de la región a donde se desplaza regularmente para ver cómo marchan sus negocios.

Staton, de padre brasilero y madre checa, nació en Medellín hace 62 años. En esta ciudad vivió hasta su adolescencia, cuando decidió viajar a Estados Unidos para estudiar Economía en la Universidad Emory, Atlanta, y Administración de Empresas en Lausana, Suiza. Su primer trabajo fue en Panamerican Beverages Inc., una planta embotelladora de la multinacional de bebidas Coca-Cola, que fundó su abuelo Albert Staton, de origen estadounidense, que se había radicado en el país.

En 1982 McDonald's lo contacta porque estaba interesada en expandir su negocio en América Latina. Staton pensó inicialmente en Colombia como el país donde podía establecer el primer negocio de la conocida marca. Hizo las gestiones necesarias para ingresar, pero sus aspiraciones se frustraron por la falta de interés del gobierno y por problemas de orden público.

Pero no desistió, así que buscó otra nación que le permitiera alcanzar sus objetivos. La seleccionada fue Argentina, que comenzaba una etapa de apertura a la inversión extranjera después de sortear varios años de dictadura militar. Allí llegó en 1985. Posteriormente, la multinacional le encargó supervisar los negocios en varias naciones de la región. A Colombia, McDonald's arribó en 1995 con la apertura de su primer local en el centro comercial Andino. Actualmente tiene 52 restaurantes en las principales ciudades del país y 13 McCafé, una nueva línea de negocios que le compite o otros de los grandes establecimientos que venden bebidas elaboradas con café.

La paciencia, el olfato y el buen manejo administrativo de la marca le permitieron a Staton dar el salto a las grandes ligas en 2006, cuando McDonald's puso en venta la franquicia para América Latina y el Caribe. En ese momento el empresario vio su oportunidad dorada y se asoció con varios inversionistas internacionales para presentar su oferta, que finalmente fue aceptada por la compañía gracias a la amplia trayectoria que tenía con la firma.

En una entrevista concedida hace un par de años para la revista Latin Trade reconoció que su éxito y el de la empresa se debe a la dedicación, la pasión y al hecho de que ha sabido rodearse de personas mejores que él. Y está dispuesto a aprovechar la buena situación económica que viven muchos países de la región para que la marca siga creciendo, para innovar y tratar de cambiar la mala imagen que tiene la comida rápida.

Staton viene con cierta regularidad al país, ya que tiene una casa de descanso en Cartagena, pero ahora no pasará tan desapercibido: gracias a su tenacidad, está en un club a donde muy pocos pueden ingresar.