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Carlos Raúl Yepes y José Alberto Vélez se despiden del GEA en los próximos días. Los dos dejan una vara muy alta para sus sucesores. | Foto: Juan Carlos Sierra

RELEVOS

Grupo Empresarial Antioqueño se renueva

Con el retiro de José Alberto Vélez del Grupo Argos y de Carlos Raúl Yepes de Bancolombia se recompone la cúpula directiva del GEA, que tiene un sistema de sucesión 'sui géneris' en el país.

12 de marzo de 2016

La renuncia de carlos Raúl Yepes a la presidencia de Bancolombia sorprendió al país, por ser este un grupo que tiene muy bien planeado el sistema de rotación en la alta dirección de las compañías.

Yepes asumió hace apenas cinco años la conducción del principal banco del país, y aún no cumple la edad de retiro (tiene 51) establecida por el Grupo Empresarial Antioqueño (GEA) en el código de sucesión, de 62 años para presidentes de compañías (prorrogables por tres más a discreción de las juntas directivas), 65 para los CEO de los holding y 72 para miembros de juntas directivas. En su caso, como él mismo explicó, renunció por razones personales y familiares que tienen que ver con su salud.

No obstante el retiro inesperado, no hubo traumatismo para escoger su sucesor. La junta directiva de Bancolombia de inmediato designó a Juan Carlos Mora, quien lleva 25 años en esta institución financiera, a lo largo de los cuales ha liderado la vicepresidencia administrativa, la de riesgos, la de servicios corporativos y actualmente la de innovación y transformación digital.

Este nombramiento está en línea con lo que ha sido la tradición del GEA, de no propiciar grandes remezones en las cabezas de las compañías. Más bien, la costumbre ha sido impulsar a las generaciones formadas en el conglomerado. El propio Carlos Raúl Yepes se formó en el antiguo Banco Industrial Colombiano, BIC (fusionado con Bancolombia), y venía de la empresa Cementos Argos. David Bojanini, presidente de la junta directiva de Bancolombia, dijo que con la elección de Mora se busca dar continuidad y seguir avanzando hacia cumplir los objetivos y los planes trazados en esta institución financiera.

El cambio de timonel en Bancolombia coincide con un momento histórico para el GEA, cuando se marcha uno de los más destacados dirigentes que ha tenido esta organización. Se trata de José Alberto Vélez, quien se retira de la presidencia del Grupo Argos pues cumplió la edad de retiro establecida.

Vélez hizo parte del grupo de profesionales a quienes, hace ya muchos años, formó Nicanor Restrepo Santamaría (fallecido el año pasado) para que administrara y liderara el futuro de estas compañías nacidas en Antioquia. Con Carlos Enrique Piedrahíta y David Bojanini, Vélez integró un equipo que internacionalizó las empresas del GEA y las convirtió en líderes en Colombia y la región.

En particular, a Vélez se le reconoce haber sido el artífice de la expansión del Grupo Argos. En 12 años, transformó una entidad netamente cementera en un conglomerado que hoy tiene inversiones en energía (Celsia), concesiones viales y aeroportuarias (Odinsa), operación de puertos (Compas) y desarrollo inmobiliario (Situm y Pactia en alianza con Conconcreto).

Para reemplazarlo fue designado Jorge Mario Velásquez, quien viene de la presidencia de Argos. Su carrera profesional está ligada a la vida de esta compañía, a donde llegó en 1983 como practicante de la Escuela de Ingeniería de Antioquia (EIA). José Alberto Vélez fue su maestro y mentor empresarial y es un ejecutivo hecho en casa, por lo cual asegura la continuidad de un modelo de gestión empresarial que se ha destacado en el país.

Estas movidas en la alta dirección del GEA han llamado la atención, pues pocas veces coinciden tantos cambios en una organización empresarial de tanta importancia y peso en la economía. Los ingresos de los tres holdings Sura, Argos y Nutresa –junto con sus filiales– equivalen al 5,8 por ciento del producto interno bruto (PIB) del país. Son, además, jugadores de primer nivel en la región.

Cabe anotar que bajo el modelo organizativo que lideraron Vélez, Piedrahíta y Bojanini se conformaron los tres holdings conocidos hoy como Grupo Sura, Grupo Argos y Grupo Nutresa. Estas cabezas se entrecruzan la propiedad accionaria y conservan el concepto de empresas inscritas en la bolsa de valores.

Cada grupo actúa como sombrilla de un conjunto de empresas que a su vez son independientes. Hay una coordinación a nivel de juntas directivas, pues los presidentes de los holdings se mezclan en ellas, lo que permite, además, compartir una filosofía empresarial.

Vale decir que estos cambios en la cúpula, entendida como las cabezas de los tres

holdings, representan la mayor renovación en la historia del GEA en el siglo XXI.

Hace dos años, se retiró Carlos Enrique Piedrahíta, quien estuvo durante más de tres décadas en la organización. Los últimos 14 años presidió el Grupo Nutresa, al que internacionalizó y convirtió en una multinacional regional, líder en el sector de alimentos. Lo reemplazó Carlos Ignacio Gallego, otro directivo formado en la organización, donde lleva 25 años.

Así las cosas, de la generación de pupilos de Nicanor Restrepo permanecerá David Bojanini, actual presidente del Grupo Sura, a quien, según los códigos de retiro, todavía le quedan cinco años en la presidencia del holding.

En el último año, también han rotado los directivos de algunas de las filiales. Es el caso del expresidente de Celsia Juan Guillermo Londoño, quien se retiró el año pasado por cumplir la edad. Durante su gestión, esta compañía del Grupo Argos cruzó las fronteras y se convirtió en una de las inversiones más estratégicas.

Para reemplazarlo asumió Ricardo Sierra Fernández, quien venía de la vicepresidencia financiera del Grupo Argos, había trabajado antes en la cementera y en Corfinsura (hoy Bancolombia) y, por tanto, ya tiene incorporado el ADN de la organización y con ello garantiza la continuidad de los planes de esta filial, una de las más jóvenes en el GEA.

Dentro de la política de sucesión y búsqueda de ejecutivos, el grupo se acompaña de firmas cazatalentos, es evidente que la trayectoria dentro de la organización tiene un gran peso para la escogencia. Sin embargo, hay excepciones.

Una de ellas se presentó como consecuencia del nombramiento de Jorge Mario Velásquez en la presidencia del Grupo Argos, que dejó vacante la cabeza de la filial cementera. Para este último cargo fue escogido, a finales del año pasado, Juan Esteban Calle, quien venía de la gerencia de Empresas Públicas de Medellín, EPM. Sin embargo, Calle no es totalmente ajeno a la organización pues su padre, Jaime Calle Garcés, fue por muchos años gerente general de Zenú, filial del Grupo Nutresa.

Observadores de la vida empresarial del país señalan que el sistema de sucesión adoptado por el GEA es sui géneris en Colombia y tiene la virtud de ayudar a que este modelo colectivo societario –reconocido nacional e internacionalmente– se mantenga y que las compañías sean sostenibles en el tiempo. La historia también parece darle la razón a la tesis de Nicanor Restrepo, de mantener separadas las cabezas de los pilares que sustentan el GEA. Esto ha permitido que haya no solo un peso pesado, sino muchos líderes capaces de llevar el barco a buen puerto. Pero, igualmente, este modelo de sucesión desarrolla uno de los principios clave que ha acompañado al grupo desde sus orígenes: que nadie se debe perpetuar en el poder.