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Jugo de Morita

Después de 43 años de estar al frente del imperio Sony Akio Morita pisa duro en Estados Unidos.

18 de diciembre de 1989

Akio Morita fracasó en su intento por inventar a finales de los años cuarenta, en la oscuridad del sótano de su casabombardea da en Tokio, una olla eléctrica para cocinar arroz. No se dio por vencido. Siguió intentando, y como no tenía material plástico -escaso por la guerra-, entonces se las ingenió para combinar un tipo de papel con material magnético y lograr el que se convertiría en uno de los grandes inventos revolucionarios de los cincuenta: las grabadoras de sonido.
Akio Morita recuerda esa época y sonríe ahora, mientras su nombre y el de la empresa que sigue encabezando, Sony, continúan apareciendo en la prensa de todo el mundo, en todos los idiomas, después de haber logrado adquirir la mayoría de las acciones de la compañia Columbia Pictures, una de las siete grandes de Hollywood, por una suma cercana a los 3.400 millones de dólares.
El nombre de Morita está asociado lo mismo que el de Sony, a algunos de los grandes inventos domésticos que han cambiado y facilitado la vida de millones de personas en el mundo: después de la grabadora, la olla eléctrica, los radios transistorizados las grabadoras portátiles con transistores y después las primitivas videograbadoras que eran pesadas y funcionaban con energía y las que Sony convirtió en portátiles y transistorizadas. Luego esas mismas videograbadoras, ya más compactas y más livianas, las lanzó para el uso doméstico para que la gente viera películas y nacieron los modelos de betamax. Y al comenzar los años 80, el gran invento, el impacto cultural sobre toda una generación, el walkman y, sucesivamente, las cámaras filmadoras superlivianas y los televisores más pequeños.
Morita sonríe cuando le dicen que ha revolucionado el mundo y responde: "Desde niño ya vivíamos en el Japón, por lo menos en mi casa, con aparatos que eran auténticas revoluciones, como el fonógrafo RCA Victor y el refrigerador Westinghouse y hasta teníamos un automóvil sedán, un Buick. De modo que lo que hice después fue buscar más comodidades que nos hicieran la vida más fácil".
Actualmente Sony es sinónimo de calidad entre los fabricantes de electrodomésticos, posee la mayor empresa discográfica norteamericana, la CBS, y con la adquisición de la Columbia (ubicando a Jon Peters y Peter Guber, los productores de Rain Man y Batman al frente de los estudios mientras la Warner, con la que ellos tenían un contrato de varios años, entabla una demanda millonaria) se ha colocado en el mismo corazón cultural de los norteamericanos, lo que ha provocado ruidosas protestas de distintos sectores económicos y financieros. Pero eso no lo molesta: "Cuando entiendan lo que estamos haciendo entonces todo será mejor".
Sony comenzó en ese sótano en 1946. Fabricó las primeras grabadoras y en los años cincuenta compró los derechos de un invento norteamericano, el transistor, y lo aplicó a los radios y el mundo entero se vio inundado con los modelos transistorizados y ese fue el despegue definitivo de la empresa.
Actualmente Morita tiene 27 fábricas en el mundo con más de 80.000 empleados. La mayor producción y un 66 por ciento de las ventas de Sony tienen lugar fuera del Japón. Comenzó a operar directamente en Estados Unidos en los años setenta, mucho antes de la aparición de inversionistas japoneses en distintas actividades norteamericanas. Actualmente Sony fabrica en Estados Unidos casi todos los televisores que vende en ese mismo territorio y la producción de su enorme fábrica en San Diego está destinada, en un 20 por ciento, a la exportación.
Hace poco Morita publicó un libro autobiográfico, escrito en colaboración con el político de derecha Shintaro Ishihara, y provocó fuertes reacciones en círculos políticos y financieros norteamericanos porque insistió firmemente en tesis expuestas anteriormente: Estados Unidos debe revitalizar su industria electrónica, depender menos de los japoneses e invertir más recursos en nuevas investigaciones y desarrollar una producción más ambiciosa, más agresiva.
Las ventas de la compañía han subido un 38 por ciento, alcanzando 16.300 millones de dólares anuales en el año fiscal que finalizó el pasado 31 de marzo. Las utilidades se duplicaron a 549 millones luego de haber superado la pelea a escala mundial, defendiendo su sistema " Betamax" ante el "VHS", fabricado por la competencia. En 1988 Sony invirtió más de 1.000 millones de dólares en investigaciones y desarrollo de nuevas líneas de productos.
Cuando alguien pregunta por qué Sony estaba interesada en comprar Columbia, siempre le responden lo mismo, tomado de una frase de Morita: es que las películas que forman una filmoteca tan importante como la de ese estudio, deben ser popularizadas aún más, tienen que ser impulsadas en el sistema de video de 8 milímetros. En otras palabras, vender más cámaras, vender más grabadoras, vender mas casetes.