Home

Economía

Artículo

El superintendente de Industria y Comercio, Pablo Felipe Robledo, ha sido implacable con los carteles empresariales de precios. | Foto: Alejandro Acosta

CARTELES

Cartel del papel higiénico: delatar paga

La Superintendencia de Industria y Comercio impuso multas por 185.000 millones de pesos a cuatro empresas involucradas en el cartel del papel higiénico. Kimberly resultó exonerada por declarar contra sus competidoras.

28 de mayo de 2016

Los beneficios por colaborar en el desmantelamiento de los carteles empresariales han demostrado ser muy efectivos. Así como ocurrió con el cartel de los cuadernos, también en el caso del papel higiénico varias de las empresas que delataron las malas prácticas que restringen la competencia fueron favorecidas con la disminución de las multas o, incluso, con su exoneración.

Dieciocho meses después de formular pliego de cargos contra cinco compañías por participar en el cartel del papel higiénico, la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) sancionó a cuatro de las participantes y a 21 directivos y exdirectivos de las sociedades. Los responsables de haber participado en el acuerdo de precios que operó entre 2000 y 2013 son Kimberly, Cartones y Papeles de Risaralda, Productos Familia y Papeles Nacionales.

Según la SIC, estas empresas incurrieron en una “conducta concertada, continuada y coordinada para fijar artificialmente el precio” de este producto básico de la canasta familiar. Drypers Andina, otra de las investigadas, resultó exonerada. Aunque las sanciones de la superintendencia contemplan multas por 185.000 millones de pesos para las cuatro empresas, en la práctica solo tres compañías tendrán que asumir esa sanción.

La multinacional Kimberly, que debía pagar 68.945 millones de pesos, la mayor suma, fue exonerada en el 100 por ciento porque fue la primera delatora del cartel. Hay que recordar que esta compañía además ha participado en el cartel de los pañales y de los cuadernos. En esta última investigación también podría salir favorecida por la misma razón.

Familia, a pesar de ser la segunda delatora y de tener derecho a una eventual reducción del 50 por ciento, no recibirá ese beneficio y deberá cancelar 62.050 millones de pesos porque incumplió los requisitos del mismo al ocultar información, no aportar pruebas relevantes y mentir en algunos aspectos. Sin embargo, la SIC decidió suavizar un poco el valor de la sanción teniendo en cuenta que la compañía confesó su conducta anticompetitiva y pidió perdón al país.

Una tercera delatora, Cartones y Papeles de Risaralda, obtuvo una reducción del 30 por ciento en la multa y deberá pagar 4.136 millones de pesos. Por su parte, Papeles Nacionales, que no colaboró en este proceso, será sancionada con 48.261 millones de pesos.

Cabe anotar que las empresas afectadas pueden interponer recurso de reposición contra la sanción ante la misma superintendencia, en los 10 días siguientes al momento en que sean notificadas. Si lo interponen, la autoridad tiene aproximadamente dos meses para resolver, y si no lo hacen, se entiende que la sanción queda en firme.

De esta manera se confirma una vez más que delatar paga. Muchos países aplican esta política con éxito, ya que gracias a ella se logra desenmascarar y obtener pruebas contundentes de los acuerdos de precios que tanto daño le hacen a los consumidores y a la libre competencia.

En el caso del cartel del papel higiénico, el tema es de gran calado si se tiene en cuenta que este es un negocio que mueve al año en Colombia 1,2 billones de pesos y que las empresas involucradas tienen una cuota de participación de mercado del 78 por ciento. En Colombia cerca de 13,3 millones de hogares usan este producto de primera necesidad, pero se calcula que debido a sus elevados precios por lo menos 3 millones de familias se abstienen de comprarlo.

La decisión de la SIC manda un nuevo mensaje a las compañías nacionales y extranjeras sobre la necesidad de que cumplan a cabalidad con las leyes del mercado porque no están exentas de que terminen siendo delatadas por la competencia.