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Doble calzada Bogotá-Girardot, variante de Melgar.

DESARROLLO

Los 10 enredos

Varios tropiezos están frenando las grandes obras de infraestructura que adelanta el país: compra de predios, líos con las comunidades, licencias ambientales y pleitos con los contratistas. ¿Cómo van las obras y cuándo terminan?

16 de junio de 2012

Hace un mes comenzó a marchar el TLC con Estados Unidos, las negociaciones con Corea acaban de finalizar y el acuerdo con la Unión Europea está a la vuelta de la esquina, pero las obras de infraestructura para competir van a media máquina. Cifras del Dane muestran que las obras civiles cayeron en el primer trimestre del año 8,1 por ciento. En carreteras, caminos, puentes y túneles, el descenso fue de 13,7 por ciento, frente a igual período del año pasado. Con excepción de los proyectos asociados a la minería y el petróleo, todo lo demás cae.

El nuevo ministro de Transporte, Miguel Peñaloza, dice que, después de dos años de estructurar los proyectos, los resultados se comenzarán a ver en los próximos meses. Pero el presidente de la Cámara Colombiana de la Infraestructura, Juan Martín Caicedo, afirma que "los primeros 'bulldózer' en las carreteras de las nuevas obras solo se verán cuando esté terminando el primer mandato del gobierno Santos".

Atribuye el rezago a problemas en la compra de predios, falta de licencias ambientales, consultas con las comunidades indígenas y afrocolombianas, interferencias en las redes de servicios públicos, bajos niveles de ejecución de las entidades públicas y a que pequeños pleitos terminan en tribunales de arbitramento. Para Andrés Jaramillo, presidente de Conalvías, es urgente agilizar los procesos de expropiación. "Venimos de un paro en el sector de casi tres años y volver a darle dinamismo será un proceso lento". Otros, como el presidente de Odinsa, Víctor Manuel Cruz, sostienen que primero había que ponerle rieles a la locomotora, con estudios y reglas de juego claras, para que comenzara a andar.

Nunca como ahora el país había contado con millonarios recursos para dejar atrás el atraso en el sector. Lo paradójico es que se están atravesando mulas muertas que impiden que avance. SEMANA presenta el estado de las diez principales obras que están en ejecución:?

1) Ruta del Sol

Es la obra más importante para conectar el centro del país con la Costa Atlántica. Se trata de un trayecto de 1.000 kilómetros, con un costo de 2.500 millones de dólares. Su construcción se dividió en tres tramos. El trayecto entre Villeta y Puerto Salgar presenta los mayores obstáculos porque afecta una reserva forestal. La Agencia Nacional de Licencias Ambientales está a la espera de que el consorcio Helios presente las propuestas para mitigar el impacto ambiental. El tramo entre San Roque y Valledupar también tiene problemas de predios. Solo el trayecto más largo entre Puerto Salgar y San Roque marcha a buen ritmo. El proyecto se debe entregar en 2016.

2) Bogotá-Girardot

Es una vía fundamental para conectar la capital de la república con el Pacífico. La obra de 130 kilómetros, que se debió entregar en 2010, va en un 70 por ciento. Hay problemas en la compra de predios en Silvania, Chinauta y El Paso. En este sitio una familia dice ser propietaria de una parte del terreno por donde pasa la vía. El pleito está en conciliación, pero ya el concesionario tiene un atraso del 15 por ciento en las obras programadas, que deberán entregarse en junio de 2013, casi tres años después de lo acordado.

3) Bogotá-Buenaventura

Esta obra vital para el comercio exterior tiene problemas ambientales y geológicos, y obstáculos relacionados con la compra de predios, con las comunidades y con la explotación ilegal de minas. La vía de 509 kilómetros en doble calzada está dividida en cuatro tramos. El más complicado es Buga-Loboguerrero, que avanzó en 31 por ciento hasta que aparecieron nuevas comunidades afrocolombianas que han frenado las obras. No estará lista antes de tres años.

4) Bogotá-Tunja-Sogamoso

Esta doble calzada de 176 kilómetros es vital para transportar productos agropecuarios hacia el centro del país. Actualmente presenta problemas de compra de predios y hay protestas de algunas comunidades porque en el contrato inicial no se establecieron algunas variantes ni puentes peatonales. Hasta hay líos con los ministerios de Medio Ambiente y de Cultura que se oponen a que la carretera pase por el Puente de Boyacá y piden construir una variante que implicaría mayores costos en una vía que ya vale 1,8 billones de pesos.

5) Autopistas de la Prosperidad

Es el proyecto más ambicioso y costoso del país: vale 15 billones de pesos. Unirá la Costa Atlántica y Pacífica pasando por Antioquia. Después de que se firmó un contrato con ISA para que realizara los estudios y adelantara las obras, el Consejo de Estado decidió que esa empresa no puede realizarlas. El próximo 26 de junio el gobierno fijará un nuevo cronograma. Se harán cinco licitaciones, de las cuales dos se adjudicarán en diciembre de este año.

6) Túnel de La Línea

La obra de este proyecto comenzó en 2004 y, según lo previsto, en septiembre de 2013 terminaría la perforación del túnel, que con 8,5 kilómetros sería el más largo del país. Sin embargo, las obras se han paralizado en varias ocasiones, pues la Corporación Autónoma Regional del Quindío denuncia que resultarían contaminadas las quebradas que surten de agua al municipio de Calarcá. En 2014 se pondría en plena operación.

7) Bogotá-Villavicencio

Es una de las obras más complejas en materia de ingeniería. Tendrá 19 túneles, tres viaductos y 41 puentes. Ya se iniciaron los trabajos para construir los accesos al puente de Quebrada Blanca y se espera terminar el proyecto en 2017. En total son 110 kilómetros, con un costo de 2 billones de pesos. La obra avanza con dificultades por las fallas geológicas de la zona. El recorrido, supuestamente de hora y media, puede tardar el doble del tiempo.

8) Túnel de Oriente

La obra es muy importante para Antioquia porque conectará a Rionegro con Medellín en un recorrido de solo 15 minutos. Ha estado paralizada durante varios meses por los impactos en el medio ambiente relacionados con posibles vertimientos en los recursos hídricos de la región. La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales levantó la restricción que pesaba sobre el proyecto y dejó la responsabilidad en manos de las corporaciones Cornare y Corantioquia, que decidirán si las obras pueden continuar, según lo que arrojen los estudios sobre el impacto ambiental. La construcción de la obra, si le dan vía libre, tardaría cuatro años.

9) Puerto de Buenaventura

Este es el dolor de cabeza de los exportadores, pues su capacidad es inferior al aumento de movimiento de carga que se espera con los acuerdos comerciales. La Sociedad Portuaria de Buenaventura firmó un contrato por 30 millones de dólares con la holandesa Van Oord para el dragado y mantenimiento, lo que permitirá que barcos más grandes lleguen a la terminal, crucial para el comercio exterior del país.

10) Ferrocarril Central

Desde hace más de diez años se ha intentado revivir el sistema ferroviario. Este gobierno quiere ponerlo a andar y estructurar el Ferrocarril Central y del Carare, una red de vías que conectará los departamentos de Cundinamarca y Boyacá con Magdalena y La Guajira. Todavía no sale a licitación y será crucial para exportar el carbón.