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La doble calzada Bogotá-Girardot, que ha sufrido muchos tropiezos, tendrá avances en 2012.

VÍAS

Manos a la obra

Uno de los principales proyectos viales del país, la Ruta del Sol, acelerará su marcha. Otras vías tienen que prender motores.

26 de noviembre de 2011

Uno de los proyectos claves para la competitividad del país es la Ruta del Sol, que unirá a Bogotá con la costa atlántica y que disminuirá de 20 horas a 10 el tiempo recorrido entre los dos puntos. Se trata de una vía de 1.070 kilómetros de longitud, adjudicada a tres consorcios que se encargarán de desarrollar igual número de tramos.

La obra comenzó en mayo pasado. Ya están construidos 150 kilómetros en doble calzada y el próximo año será el despegue definitivo pues se debe acelerar la adquisición de predios para seguir avanzando con esta obra, que tendrá un costo total de 2.500 millones de dólares y que deberá estar terminada en cinco años.

Dentro de los tres concesionarios, el consorcio Ruta del Sol SAS –conformado por la empresa brasileña Odebrech y las colombianas Episol, de propiedad de Corficolombiana, y CSS Constructores, de los hermanos Solarte– será el encargado de ejecutar el mayor tramo. Se trata de un trayecto de 528 kilómetros –en una segunda calzada– que va desde Puerto Salgar, en Cundinamarca, hasta San Roque, en el Cesar, así como el mantenimiento de la vía existente. El consorcio vial Helios, conformado por las firmas colombianas Carlos Alberto Solarte, Conconcreto, CSS Constructores y la argentina Lecsa, deberá seguir adelante con las obras de la ruta entre Villeta y Puerto Salgar, que ha sufrido tropiezos por la ola invernal.
El consorcio colombo-italiano Yuma seguirá con el tramo comprendido entre San Roque y Valledupar.

Vías de competitividad

El gobierno destinó 3,6 billones de pesos para 1.634 kilómetros de vías, 127 puentes y 15 túneles, distribuidos en 18 corredores viales que facilitarán movilizar mercancías desde los centros de producción hasta los principales puertos.

El Invías sacará a licitación estos proyectos, que estarán adjudicados en 2012. Entre las vías se encuentran la transversal Medellín-Quibdó, Citronela-Loboguerrero, en el Valle del Cauca, y Popayán-La Plata-Manizales-Fresno. Uno de los proyectos que demandan atención prioritaria es el de la doble calzada Buga-Buenaventura-Loboguerrero, que es vital para transportar mercancías que van del interior del país a este puerto del Pacífico.
 
Bogotá-Girardot.

Esta importante vía deberá quedar terminada en un 95 por ciento en octubre del año entrante. Según los planes de la concesión, se concluirá la construcción de varios viaductos y puentes que permitirán reducir el tiempo de recorrido. El principal obstáculo a resolver en 2012 es la compra de 800 predios, de los cuales ya se ha hecho oferta en 350.
 
Segundo túnel de La Línea

Están listos los diseños para contratar las obras para el segundo túnel de La Línea, entre Cajamarca y Calarcá, un proyecto de vital importancia, más en los actuales momentos, cuando el interior del país está incomunicado con el Pacífico colombiano. La licitación para el proyecto se hará en 2012.

Autopistas del café

Están en operación los 260 kilómetros del proyecto que comunica a Manizales con La Paila. El año entrante se entregarán dos obras que le adicionaron al contrato: la Variante Sur y el puente de la Quiebra del Billar.
 
Autopistas de la Montaña

Su proceso de estructuración comenzará el año entrante, así como la búsqueda de recursos, teniendo en cuenta que es una de las obras de infraestructura más costosas –alrededor de 15 billones de pesos–, que se ejecutará en varias etapas. El gobierno reconoce que este proyecto está pensado para el largo plazo debido a lo complejo de la topografía, que demandaría construir 131 túneles y 606 puentes. El proyecto facilitaría la movilización de viajeros de Medellín hacia la costa atlántica y el Eje Cafetero.
 
Transversal de las Américas

Para el desarrollo de este proyecto vial de 706 kilómetros, comprendidos entre la frontera de Venezuela y el río Atrato, el concesionario tendrá que continuar con los diálogos con las comunidades. Inicialmente se tenía previsto llegar a Panamá, pero debido a que había que atravesar el Tapón del Darién, una zona de gran riqueza en fauna y flora, se decidió recortar el trazado. En el primer trimestre de 2012 comenzarán las primeras obras de un proyecto que ha tenido la oposición de varias comunidades y el rechazo de ambientalistas desde que fue anunciado.