“Nadie gana” con huelga del carbón: Santos

Los esfuerzos del Gobierno para evitar una parálisis en las operaciones del complejo carbonero de El Cerrejón fueron infructuosos. El presidente Juan Manuel Santos entró en el debate.

Tras lamentar la huelga de trabajadores que se adelanta el sindicato de la mina de carbón más grande de América, El Cerrejón, aseguró que con esta situación nadie gana, 'pierde el país'.

"Pierde mucho, porque cada día que pasa deja de percibir regalías, deja de percibir una serie de ingresos muy importantes que van en su inmensa mayoría a la inversión social", declaró Santos en su programa de radio "En línea con el presidente".

Luego de más de dos meses de negociaciones con los directivos de la compañía el Sindicato de Trabajadores (Sintracarbón) anunció que entraban en cese indefinido a partir del jueves 7 de febrero a las 3.00 de la tarde.

Las directivas del Cerrejón propusieron incremento en el salario de los trabajadores del 5 por ciento para el primer año y del 4,2 por ciento para el segundo año de la convención colectiva. Además, ofrecieron  un bono especial y un bono sujeto a la firma de la convención que sumados representan 12,5 millones de pesos para cada trabajador.

Otras propuestas al sindicato estaban relacionadas con beneficios en salud, préstamos para vivienda, auxilios para educación, transporte, cultura y deporte, entre otros.Cerrejón sostiene que en este escenario de un paro indefinido pierde la compañía, pierden los trabajadores, pierde la economía regional, pero sobre todo pierde La Guajira y el país.

El presidente del sindicato, Igor Díaz, dijo que por primera vez en 22 años se veían obligados a tomar esta decisión porque no lograron que la compañía, propiedad de las multinacionales BHP Billiton, AngloAmerican y Glencore-Xstrata, reconociera los reclamos de los trabajadores en las peticiones relacionadas con salud, riesgos laborales y equidad con los trabajadores tercerizados.


 

Según las directivas del sindicato desde el 29 de noviembre pasado se entregó el pliego de peticiones a la compañía, sin que se lograran mayores avances, especialmente en lo relacionado con el reconocimiento de las enfermedades que sufren 700 trabajadores relacionadas con el trabajo de la explotación de carbón y para que se les brindaran garantías laborales a los cerca de 7.000 contratistas.

Pese a que la empresa presentó varias contrapropuestas no se logró evitar el paro, que se presenta en un momento difícil para la industria carbonífera del país ante el desplome en los precios internacionales del mineral y el anuncio de varias compañías de suspender sus proyectos.

El Gobierno a través del ministro de Trabajo, Rafael Pardo, y del vicepresidente, Angelino Garzón, intervino para tratar de lograr un acercamiento entre las partes.