Un año para dar el estartazo

Ciencia, Tecnología e Innovación siempre han sido 'la cenicienta' de las políticas públicas. Son ínfimos los recursos que se les asignan durante la discusión de los Presupuestos Nacionales en el Congreso de la República. Para la vigencia de 2011, el Legislativo aprobó un presupuesto de 282.000 millones. Esto no representa un mayor cambio frente a la tradición, pues esos dineros no alcanzan a representar ni siquiera el 0,1 por ciento del PIB. El objetivo de largo plazo es destinar al menos un punto del PIB (entre 4,5 y 5 billones de pesos), para darle el empujón final al tema, como ocurre en Brasil o México.

Pero falta todavía mucho trecho por recorrer. Esa es la expectativa que existe entre los expertos en el tema, pues actualmente se discute en el Congreso la reforma al régimen de regalías, que busca destinarles 10 por ciento de esos recursos a las tareas de la innovación, tecnología y ciencia. Eso significa inyectarles cerca de un billón de pesos, pero a partir de 2012.

De ahí que el director del Departamento Administrativo de Ciencia, Tecnología e Innovación (Colciencias), Jaime Restrepo Cuartas, considere que el próximo año será el de la consolidación.

En 2009, la agenda del sector se transformó, con la ley que reestructuró el sistema de ciencia, tecnología e innovación del país, y se le dio a Colciencias el rango de Departamento Administrativo, dependiente de la Presidencia de la República.

Según Restrepo, "el problema es que todavía muchos actores no perciben a Colciencias como lo que es: prácticamente un Ministerio de Innovación. Por eso, es necesario sentar las bases de la transformación, reestructurando el Departamento, para que cuando lleguen los recursos estemos listos para aplicarlos rápidamente", comentó. Esa reestructuración implica acomodar a la dependencia para que cumpla sus nuevas funciones como máximo ente coordinador de la política de innovación en el país.

Esto no implica que no se vaya a avanzar en otros frentes. Deberán ponerse en marcha los primeros cuatro centros regionales de innovación, que investigarán en temas específicos, en un trabajo conjunto entre la empresa privada, las universidades, los gobiernos locales y la Nación.

Un ejemplo es el Centro de Bioinformática y Biología Computacional de Colombia y Latinoamérica que fue inaugurado hace varias semanas en Manizales, con una inversión inicial de 4.600 millones de pesos. Allí se realizarán investigaciones y desarrollos de software con aplicaciones, por ejemplo, en ingeniería genética o ciencias agrícolas.

Allí participan no solo el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones y Colciencias, sino también varias universidades del Eje Cafetero y compañías como Microsoft.

Existen actualmente otros tres Centros Regionales de Innovación en Cesar, La Guajira y Huila, que van a hacer desarrollos en temas como ganadería, carbón y acuicultura. Además, se están preparando otros seis en las áreas de biodiversidad, agricultura, industria frutícola, agua, defensa y agroindustrial.

También hay metas en formación académica. El objetivo es que otros 500 estudiantes inicien sus cursos de doctorado. Este es un avance importante, pues hasta el momento cada año apenas 150 personas iniciaban este tipo de estudios. La meta es lograr 800 doctores por año.

El presidente de la Asociación Colombiana para el Avance de la Ciencia (Acac), Eduardo Posada, señaló que el país ya ha dado pasos importantes en este frente, pues actualmente existen más de 15.000 investigadores científicos en el país y unos 4.000 grupos: ese es un terreno abonado para el desarrollo innovador en Colombia.

El otro impulso será el crédito que por 500 millones de dólares dio la banca multilateral para el fortalecimiento institucional. El director de Colciencias aseguró que de esos recursos se empezarán a aplicar los primeros 50 millones de dólares el próximo año.