El TLC entre Estados Unidos y Colombia seguirá estando en la agenda durante el gobierno de Barack Obama. | Foto: Daniel Reina

ECONOMÍA.

TLC seguirá de primero en la agenda

A pesar de las críticas de Obama a Colombia, su llegada al poder es una buena noticia para los intereses económicos del país.

4 de noviembre de 2008

Hay razones de sobra para que los empresarios colombianos reciban con optimismo la llegada de Barack Obama a la Casa Blanca. Aunque durante la campaña, el líder demócrata puso en evidencia sus enormes reservas acerca del país y el gobierno Uribe, por otra parte es claro que “una cosa es Obama de candidato y otra de presidente”, según dijo el presidente de la Cámara Colombiana de la Infraestructura, Juan Martín Caicedo. Esa premisa tiene mucho fundamento, pues el panorama político es muy distinto cuando se busca votos que cuando se trata de gobernar.

Inicialmente la agenda económica va a estar marcada por la aprobación del Tratado de Libre Comercio (TLC) en el Congreso gringo. Hoy el análisis sobre las implicaciones del acuerdo es muy distinto al que se hacía hace un par de meses.

El Obama que ocupará la Casa Blanca va a estar presionado por el enorme problema económico que enfrenta Estados Unidos. En ese escenario, el nuevo Presidente debe entender que el libre comercio es una de las herramientas con las que cuenta para enfrentar la dura situación económica mundial. El Presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), Rafael Mejía, aseguró que actualmente muchos sectores productivos de Estados Unidos están preocupados acerca de dónde pondrán los excedentes de producción que les dejará la caída de la demanda interna por cuenta de la crisis.

Así que el valor estratégico de los TLC hoy podría tener un giro importante en la percepción de los demócratas, que serán los encargados de llevar a mejor puerto a Estados Unidos en medio de la tormenta económica actual.

Hay otro factor: la elección de una buena parte del Congreso, que renueva los aires políticos, pero ratifica un gran bloque demócrata en el poder.

Mejía aseguró que “es más fácil reanudar la discusión del TLC, con un gran esfuerzo político bipartidista hacia Estados Unidos, teniendo al frente un gran bloque demócrata en el poder. La situación habría sido más difícil con un Presidente Republicano y un Congreso haciéndole oposición mayoritariamente”.

Además, Mejía señala que Colombia ha venido haciendo la tarea, dando las explicaciones necesarias y mostrando los esfuerzos que se han hecho en temas sensibles como la seguridad de los sindicalistas; esto podría quitarle presión al gobierno colombiano y empezar a jugar a favor.

El presidente de la Federación Nacional de Avicultores (Fenavi), Jorge Enrique Bedoya, cree que la situación con Obama no será difícil. “Tal vez va a exigir cosas adicionales a Colombia a cambio de pedirle al Congreso que apruebe el TLC, pero las relaciones bilaterales persistirán”, explicó.

Bedoya plantea dos posibles escenarios acerca del TLC: uno en el que Obama se “lava las manos” y deja que el Congreso apruebe el TLC antes de terminar 2008, así la cuenta de cobro quedará en el balance de la administración Bush; la otra posibilidad es que decida tomar cartas en el asunto, plantear nuevos requisitos a Colombia y aplazar la aprobación en el Congreso mínimo para junio del próximo año.

Caicedo, de la CCI, explica que lo principal con Obama es superar las prevenciones que mostró siendo candidato. “Eso va a quedar superado cuando en su condición de Presidente, Barack entienda la importancia de tener una muy buena relación con Colombia. En la CCI creemos que Colombia es estratégica para Estados Unidos por su parte en la región y esa relación no se debe reflejar sólo con buenos sentimientos y retórica sino en el apoyo contundente del nuevo gobierno americano al tratado”.

En el mediano plazo, la agenda económica bilateral va a estar marcada por lo que ocurra con el TLC. Es evidente que la suerte del tratado definirá muchas cosas del futuro en las relaciones con Colombia. Los empresarios son optimistas y creen que, sobre ese tema, hay luz al final del túnel.