AMNISTIA HOMOSEXUAL

14 de marzo de 1994

SER HOMOSEXUAL O lesbiana puede llevar en muchas partes del mundo a la cárcel, y en esos casos Amnistía Internacional considera al afectado como preso de conciencia.
Ese y otros conceptos están contenidos en el informe titulado Romper el silencio: Violaciones de derechos humanos basados en la orientación sexual, que acaba de publicar esa organización de defensa de derechos humanos.
Según el documento, esas personas son objeto de persecución oficial por sus preferencias sexuales, y en algunos casos sufren tortura y hasta pena de muerté incluso en países donde en otras áreas los derechos humanos son generalmente respetados. Entre esos países se menciona a Costa Rica, Estados Unidos, Gran Bretaña, Rumania y Turquía, donde las autoridades cometen abusos, y a otros, como Australia, donde la legislación considera al homosexualismo como un delito, así sea practicado en la completa privacidad.