Baja la fiebre

25 de octubre de 1993

EL MERCADO AUTOmotor sigue disparado. A fines de agosto se habían vendido 96.500 unidades en el país, con un aumento del 150 porciento con respecto a 1992. Pero para muchos observadores, "la locura está pasando". Dos son los síntomas de ello: una baja en la venta de importados, sobre todo de algunas marcas que saturaron el mercado, y la conformación de inventarios en la red de distribución de vehículos nacionales. Amediados de 1992 las ventas superaban la disponibilidad de vehículos -y era necesario esperar hasta tres meses para obtener un automóvil-. Hoy hay un número importante de carros en stock. Quedan algunos modelos en los cuales la demanda supera la producción. Pero no por mucho tiempo, según los expertos.