CANAL FERREO

17 de agosto de 1992

LOS PANAMEÑOS andan preocupados por que el parlamento de Costa Rica aprobó construir una línea férrea de 400 kilómetros de largo para conectar el Caribe con el Pacífico, con un costo de 1.000 millones de dólares. Lo que más les duele es que los inversionistas norteamericanos autores de la iniciativa hicieron primero la oferta a Panamá, donde resultaba más barato el proyecto, pero según el presidente de la comixión de Asuntos Canaleros, Leo González, la ineficiencia del gobierno dejó perder las oportunidad. Guillermo Quijano, representante ante la Comisión para la modernización del Canal, dijo que "cualquier construcción tendría efectos negativos sobre la economía nacional" La modernización del Canal quedó, por lo mismo, convertida en una prioridad nacional absoluta, para poder competir con los ticos.