El halcón

20 de marzo de 2005

Washington lanzó la semana pasada un polémico candidato para reemplazar a James Wolfeshon en la presidencia del Banco Mundial. Se trata de Paul Wolfowitz, arquitecto de la invasión a Irak, antiguo 'número dos' en el Pentágono y uno de los principales ideólogos del movimiento neoconservador, que fue designado a dedo por el presidente George W. Bush para dirigir el organismo internacional. Los países europeos que se opusieron a la guerra en Irak recibieron el anuncio como una bofetada, pero poco podrán hacer para frenar la candidatura. Estados Unidos es el principal accionista del banco y la tradición dice que el organismo debe ser presidido por quien designe la Casa Blanca, mientras que el Fondo Monetario Internacional siempre va a las manos de un candidato de Europa.