El yeti brasileño

LA SEMANA PASADA partió en la Amazonia del Brasil una expedición destinada a encontrar lo que podría ser uno de los hallazgos zoológicos más importantes de los últimos tiempos. El objetivo es el mapinguari, un monstruo de 1,80 metros de altura que tiene los pies hacia atrás y posee una glándula en el abdomen con la que despide un agresivo olor nauseabundo. La empresa es dirigida por el científico David Oren, quien le ha dado credibilidad a las descripciones hechas por los indígenas, que sostienen haber tenido a uno en cautiverio, al cual tuvieron que dejar en libertad debido a su pestilencia. Los científicos piensan que la criatura puede tratarse de un perezoso gigante que se creía extinguido hace 8.000 años.