Finanzas vaticanas

17 de abril de 2005

El próximo papa tendrá que lidiar con algo más que el futuro de la Iglesia: la delicada situación financiera del Vaticano. Una de las responsabilidades del próximo Pontífice será enderezar las maltrechas finanzas de la Santa Sede, que durante los últimos tres años han estado con el saldo en rojo. El déficit presupuestario del Vaticano se ha agravado en los últimos años debido al aumento de la actividad diplomática de la Santa Sede, al elevado costo de las indemnizaciones pagadas por abusos sexuales y a la debilidad del dólar. Aunque más de una vez se ha dicho que el Vaticano contempla la posibilidad de vender estatuas de Miguel Ángel como la famosa Pietá, esculturas de Bernini u otras obras maestras para pagar sus deudas, los funcionarios de la Santa Sede han respondido siempre que tales obras de arte constituyen "un tesoro de toda la humanidad" y no pueden venderse.