La guerra continúa

NINGUNA OCASION como la temporada de Navidad para que se recrudezca uno de los enfrentamientos más encarnizados de la era moderna: la guerra entre Nintendo y Sega. No sólo en su más grande mercado, Estados Unidos, donde Nintendo vendió ya 26 millones de video juegos de Super Mario -su divertido estandarte- y donde Sega ha colocado 13 millones de "Génesis -su juego estrella-, sino en todos los hogares del planeta.
Ambas compañías -que compitieron este año fieramente en todos los mercados del mundo, con triunfos de Sega en Europa y de Nintendo en Japón, y un empate según todas las encuestas en Estados Unidos- esperan que sus ventas de Navidad superen por mucho los cinco millones de dólares.
Para ello están confiando en que su simpático fontanero y su pequeño demonio azul no sólo consoliden su presencia en el mercado estadounidense, donde se calcula que han invadido ya más la mitad de los hogares, sino que se posicione definitivamente en los cada vez más abiertos mercados de los países del Tercer Mundo.