La Virgen del Metro

La situación se estaba volviendo inmanejable para las autoridades de Ciudad de México desde el primero de junio, cuando un empleado de aseo descubrió en una estación del metro una baldosa en la cual la humedad había producido una mancha semejante a la Virgen María. Desde entonces miles de personas se arremolinaban en la estación Hidalgo, una de las más concurridas de la ciudad, con el consecuente perjuicio para la circulación. El problema terminó el martes de la semana pasada cuando las autoridades del metro costearon el traslado de la baldosa a una esquina encima de la estación. Allí la imagen (que no es reconocida como milagrosa por la Iglesia) fue saludada por mariachis y por la multitud que echaba vivas a la Virgen del Metro.