Mejos con I Ching

11 de octubre de 1993

EN ESTADOS UNIDOS -como en el resto del mundo- se está volviendo cada vez más difícil hacer predicciones económicas. Y su credibilidad está en franca decaída. La semana pasada, la Casa Blanca tuvo que revizar -demanera dramática- sus proyecciones de crecimiento económico para 1993: del optimista 3.1 por ciento que había proyectado a comienzos del año, tuvo que pasar a un mediocre dos porciento, ante la resistencia de la económia estadounidense a mostrar signos de recuperación. No faltaron por esos los "ácidos" comentarios de algunos especialistas, incluso uno según el cual " si usted necesita una proyección económica tal vez el I Ching le pueda ayudar", como tituló Paul Magnusson su columna de opinión en el último número de la revista Businessweek.