NI CON PALO

9 de octubre de 1995

La empresa norteamericana Enron está encontrando la horma de su zapato. Hace unos meses esa firma decidió salirse del contrato de construcción de Termovalle, una planta de generación de energía en cercanías de Cali, sin que el gobierno colombiano pudiera hacer nada para impedirlo. Pero en otras latitudes está pagando las consecuencias. Hace unas semanas el gobierno del estado hindú de Maharastra decidió suspender la construcción de una planta térmoeléctrica adelantada por Enron, por considerar que el valor de la misma era excesivo. El proyecto en cuestión tiene un costo de 2.800 millones de dólares y una capacidad de generación de 2.015 megavatios, equivalente a dos proyectos del Guavio o a 10 plantas como la frustrada de Termovalle.