NI LA CARA DEL DALAI

1 de julio de 1996

La extrema tensión que vive el Tíbet por la ocupación china alcanzó la semana pasada nuevas alturas cuando los monjes de los principales monasterios budistas se negaron a cumplir una orden del gobierno de Beijing que les prohibía la exhibición en sus recintos de retratos de su líder religioso, el Dalai Lama. La orden provocó violentos enfrentamientos entre los ascéticos monjes y la policía china, que incluso fueron fotografiados por turistas. Como protesta los religiosos abandonaron sus monasterios y, por ejemplo, el de Ganden, a 40 kilómetros de la capital Lhasa, está prácticamente vacío. El asunto es un nuevo problema de imagen para China, que anexó Tíbet en 1949 y, a pesar de sus afirmaciones oficiales, ha extremado la represión religiosa allí.