No hay con quien

6 de abril de 1992

Algunos incidentes judiciales curiosos vienen ocurriendo con el concordato de la constructura Pinski. A finales del año pasado, la Superintendencia de Sociedades declaró finalizado el proceso y envió el expediente a un juez civil de Cali, que debía proceder a tramitar la quiebra. Sin embargo, el juez devolvió la documentación con la advertencia de que el trámite debería ser adelantado por los acreedores. Ante ese hecho, los acreedores, entre ellos los bancos de Colombia y Comercio, procedieron a pedirla. El juez acaba de negarles la aceptación de esa decisión, advirtiendo que la Superintendencia debe conocer del asunto y que él no es competente. En esas condiciones no hay quien se apropie judicialmente del destino final de la empresa Pinski.