Peleando por cosas mínimas

23 de diciembre de 2006

La discusión sobre el salario mínimo ha perdido relevancia. La pelea este año se centró exclusivamente en unos puntos porcentuales que cada vez representan menos para los trabajadores beneficiados por el incremento, y una tupida agenda de temas, que terminó enrareciendo el debate. La concertación se rompió no porque los empresarios pusieran sobre la mesa una suma insatisfactoria para los sindicatos, sino porque no hubo acuerdo acerca de permisos sindicales, asunto en el que insistió Fecode, agremiación de los profesores del sector educativo público. En la lista de temas abordados están las alzas de los peajes, programas para madres comunitarias y el proceso de paz con el ELN; parece que hubiera empezado la discusión del Plan Nacional de Desarrollo de manera anticipada. Gracias a que la inflación cede y por eso los porcentajes de aumento ya no son tan representativos como hace una década, es hora de reformar la manera como se discute el tema y si realmente lo ideal es colgar toda la agenda nacional a la discusión de una cifra cada vez menos importante para muchos.