PIRATAS AMARILLOS

25 de diciembre de 1995

EL PARAISO MUNDIAL DE la piratería de software está en el centro comercial Golden Arcades en Hong Kong. Allí puede conseguirse una copia de Windows 95 por sólo cinco dólares, cuando su precio real es de 180 dólares. Los programas ilegales son hechos en la provincia china Guangdong y empacados y distribuidos en Hong Kong. La piratería tomó ribetes dramáticos este año, por el auge del CD ROM, pues en un solo disco puede guardarse la información que antes se almacenaba en decenas de disquetes. Ni el convenio suscrito entre Estados Unidos y China para la protección de la propiedad ni las constantes redadas de la policía de Hong Kong han desanimado a los programadores clandestinos, que se precian de copiar cualquier programa en pocos minutos. Lo peor es que estas versiones no sólo se consiguen en el sudeste asiático, también las hay en Europa y Estados Unidos. Las pérdidas de la industria de software por cuenta de la piratería china fueron estimadas en 1994 en 134 millones de dólares.