SUMO LUCHADOR

1 de junio de 1992

EL SUMO NO SOLO ES el deporte nacional del Japón, sino una pasión para la mayoría de los japoneses. Todo lo que tiene que ver con esa extraña lucha en la que dos gigantes se enfrentan con el propósito de sacar al contendor del área delimitada, es materia de primera página. Por eso, la semana pasada el país se estremeció con una polémica generada por un luchador extranjero al cual se le negó el ascenso a la categoría de Yokozuna, esto es, Gran Campeón. Se trata del hawaiano konishiki (cuyo nombre verdadero es Saleeva Atisanoe), quien aparentemente suplantado por un compañero, hizo unas declaraciones a The New York Times según las cuales se le había negado el nombramiento por no ser japonés. El asunto llegó rápidamente a las altas esferas, en donde el primer ministro Kiichi Miyazawa terció para afirmar que las razones étnicas jamás pesarían en una decisión de esa naturaleza. A pesar de los alega- tos oficiales, el asunto quedó en el aire porque aunque Konishiki negó haber hecho la acusación, un alto funcionario encargado de dar los títulos sostuvo que los extranjeros "no tienen el espíritu que es debido para alcanzar el título de Yokozuna. "