TRAGEDIA EN IRLANDA

17 de agosto de 1998

El proceso de paz de Irlanda del Norte, que ha creado grandes esperanzas para los habitantes de esa región, recibió el domingo 12 de julio un duro golpe cuando tres pequeños hermanos fueron asesinados mediante una bomba incendiaria que los carbonizó en sus propias camas en la localidad de Ballymoney. Los pequeños eran católicos que vivían en un sector predominantemente protestante.