VISITA INOPORTUNA

27 de junio de 1994

LOS RECUERDOS DE la Segunda Guerra Mundial están de moda. Desde hace algunos días está confirmado que el canciller (primer ministro) alemán, Helmut Kohl, no asistirá a la conmemoración del Día D, la invasión aliada a Normandía realizada el 6 de junio de 1944.
Pero no sucede lo mismo con la versión no oficial, según la cual el emperador japonés Akihito visitaría la localidad hawaiana de Pearl Harbor en el trayecto de regreso de su primera visita oficial a Estados Unidos, en el presente mes de junio.
La idea, según se dice, sería que el soberano visitara el monumento del acorazado Arizona, hundido en el ataque lanzado a la base naval estadounidense por la aviación japonesa en diciembre de 1941, y presentará excusas por ese acto de guerra que precipitó a Estados Unidos a entrar en la conflagración.
Los políticos japoneses de derecha se oponen con base en la interpretación oficial de la guerra, según la cual el ataque japonés se hizo inevitable por el bloqueo de petróleo y acero impuesto por los aliados ante su alianza con Alemania.