| Foto: Unimagdalena

REGIÓN

Turbia elección de rector de la UniMagdalena

El proceso de elección de Pablo Vera Salazar ha estado teñido de controversia y de polémica. Este es lo que está pasando

29 de septiembre de 2016

Poder, intereses y vínculos con organizaciones que rozan el límite de lo legal o lo superan. En los últimos años las gestiones de varias instituciones de educación superior del país se han caracterizado por estas tres lógicas. Supuestamente, porque aunque existen denuncias públicas, la mayoría materializadas por el Ministerio de Educación (MEN) ante la Fiscalía General de la Nación, muchos casos todavía no cuentan con sentencia firme y no van más allá.

La Universidad del Magdalena tiene la mala suerte de pertenecer a esta lista de instituciones señaladas. Desde hace ocho años, no sólo trata de disipar las dudas que existen en torno a su gestión, sino de acallar aquellas voces que asocian a parte de su personal con organizaciones fuera de la ley.

La última polémica que tiene en jaque a la Unimagdalena es la elección del nuevo rector, proceso que también se ha visto empañado por la sombra del paramilitarismo, además de denuncias por coacción. 

El Consejo Superior de la institución eligió ayer por unanimidad (seis votos a favor) a Pablo Vera Salazar nuevo rector. Lo hizo sin la presencia de tres de sus nueve miembros que, de acuerdo con fuentes de la universidad, estaban citados en Bogotá a esa misma hora por el ministro de Educación encargado, Francisco Cardona. Nadie del Ministerio de Educación (MEN) quiso confirmar esta información. 

Los ausentes fueron: la representante del Ministerio de Educación (MEN), Raquel Díaz Ortiz; el delegado de los exrectores, Gustavo Cotes, y el de las directivas académicas, Antonio Navarro Hernández.

Los que sí votaron, y todos a favor de Vera, fueron la gobernadora de Magdalena, Rosa Cotes, presidenta también del Consejo; el representante del presidente de la República, el general Juan Salcedo Lora; el de los gremios económicos y empresariales, José Miguel Berdugo; el de los estudiantes, Fabio Fernández; el de los egresados, Anuar Saker, y el de los docentes, Óscar García Vargas. 

Vera, ingeniero civil de formación, ejerció como vicerrector de extensión y proyección social durante el mandato del ahora exrector Ruthber Escorcia, a quien reemplazará a partir del 27 de noviembre después de ocho años en el cargo. Se medía con Pedro Eslava, vicerrector académico de la institución, a quien el Consejo Superior no otorgó ningún voto. Ambos llegaron a esa votación final frente al Consejo superior tras acumular el primero 6.140 votos en las urnas (5.873 de los estudiantes y 267 de los profesores), y el segundo 5.084 (4.646 y 438, respectivamente) en las primeras votaciones realizadas a mediados de septiembre.

En procesos anteriores de elección de la rectoría, los profesores Sandra Vilardy Quiroga, Jorge Elías Caro, Francisco García Rentería, José Pacheco Ricaurte, William Renán, Fabio Silva Vallejo, Gustavo Chang Nieto, Camilo Botero y Stalin Ballesteros García fueron amenazados de muerte por medio de un correo electrónico por incitar al voto en blanco. “Por cada demanda o proceso judicial en nuestra contra, morirá uno de ustedes, ratas”, decía. En conversaciones con La W Radio, Ballesteros García también denunció que en esta elección hubo coacción para votar a favor de la candidatura de Pedro Eslava, encargado de la contratación del personal docente.

En cuanto al nuevo rector, Pablo Vera Salazar, una fuente cercana a la Universidad del Magdalena relató a Semana Educación que existen indicios de su vinculación con el paramilitarismo entre 1998 y 2002. “Cuando Carlos Caicedo era rector (el también exalcalde de Santa Marta denunció amenazas de paramilitares en su contra luego de que tres miembros de la universidad fueran asesinados, dos profesores y un estudiante). Se dice que Vera era el enlace con Jorge 40, comandante del Bloque Norte de las AUC”, asegura esta persona. Esta versión fue confirmada por el docente Stalin Ballesteros García a La W Radio.

Vera desmintió estos nexos con el paramilitarismos en la misma cadena radiofónica y denunció que lo que se está haciendo con él "es una infamia". Lo cierto es que el nuevo rector no tiene ninguna denuncia formal interpuesta contra él por estos motivos. 

Estas mismas fuentes también acusaron a Vera de tener lazos con la gobernadora de Magdalena, Rosa Cotes, quien podría haber favorecido la elección del nuevo rector. Sin embargo, y según voceros de la Gobernación, Cotes ni siquiera estuvo presente en la votación de Vera, sino que Álvaro Méndez, gobernador encargado, acudió en representación.

A este respecto, Ruthber Escorcia le dijo a Semana Educación que si bien no se atrevía a calificar de maniobra política el hecho de que Cotes convocara al Consejo Superior a deliberar cuando parte de sus miembros estaban reunidos con el ministro de Educación en Bogotá, en todos los años que él estuvo al frente de la rectoría de la Universidad del Magdalena siempre se intentó que estuviera el Consejo en pleno, "independientemente de que existan reglamentos que permitan tener un número menor de miembros para tomar una decisión”. 

El ex rector también estuvo en la mira de todas las críticas durante su gestión que duró ocho años. En varias ocasiones, parte de la comunidad educativa le acusó de querer perpetuarse en el poder y de contratar a miembros de su familia para desempeñar diversas funciones dentro de la universidad, como también denunció el portal Las2Orillas.