Estudiantes desarrollan un proyecto para reutilizar los desechos “del café”

Carlos Covaleda y Santiago Sepúlveda son estudiantes de la IE Rural El Naranjal, ubicada en la vereda del mismo nombre en el municipio de Quimbaya, Quindío. Ellos, junto al docente Isnardo Rivera, llevaban años preocupados por el problema de contaminación que producen los desechos de la industria cafetera en quebradas, ríos y laderas, especialmente en su etapa de preparación. Su sentido de pertenencia, así como su compromiso con la tierra que les vio nacer, les llevó a idear unas briquetas construidas a partir de la mezcla de todos estos sobrantes que pueden ser empleadas para diferentes usos.

Con su iniciativa, a la que denominaron Leños Ecológicos, aspiran a solucionar esta problemática. Esta surgió en el marco del programa Escuela para el Emprendimiento BBVA que cumple dos años en el Eje Cafetero y que les ha permitido estructurar su idea hasta convertirla en un proyecto viable y sólido. Gracias al apoyo que les brindó la escuela lograron presentar su proyecto en diciembre del año pasado en la feria estudiantil Diseña el Cambio en Beijing, China.

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Para Mauricio Flores Marín, director de Responsabilidad Corporativa de la entidad bancaria , “Escuela para el Emprendimiento es la mejor oportunidad para entregar a estos jóvenes herramientas que les permita consolidar un proyecto de vida por medio de competencias financieras y empresariales y hacer realidad sus primeros sueños”, dijo Flores Marín.

Covaleda, Sepúlveda y el docente Rivera desarrollaron esta idea de negocio a partir de los residuos del café, tanto de los que salen del proceso de beneficio del grano consistentes en cáscaras o mucílago, cisco de café seco, y los residuos que quedan después de ser colado. Tras su tratamiento, se producen unas briquetas incandescentes para tres propósitos: aromaticas, repelentes de insectos y térmicas.

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“Es una idea de negocio viable,que ha generado impacto en la zona, ya que los caficultores han modificado gradualmente algunas de sus prácticas cotidianas de cultivo en su producción primaria y de transformación del café con los propósitos de ser amigables con el medio ambiente”, recalcó el rector Gerardo Burgos de la institución educativa El Naranjal.

Además de Quindío y los departamentos del Eje Cafetero, Escuela para el Emprendimiento también ha llegado a Cundinamarca, Santander, Atlántico y Tolima, donde ha beneficiado a más de 80.000 estudiantes y 500 docentes. En 2017, la iniciativa se extenderá a cinco departamentos más (La Guajira, Cesar, Huila, Norte de Santander y Cauca) y a un total de 126.000 estudiantes.

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