Los proyectos pedagógicos transversales son fundamentales para una educación de calidad.

CURRÍCULO

Formar a la ciudadanía

Los programas de educación sexual, ambiental y vial dejaron de ser las materias ‘costura’ en las instituciones educativas de Medellín: a través de proyectos de investigación se han convertido en el eje articulador de una formación interdisciplinar que además se inscribe en el desarrollo municipal y de la comunidad.

29 de septiembre de 2014

El decreto 1860 de la Ley 115 de 1994 estableció los llamados Proyectos Pedagógicos para las instituciones educativas del país. Según la norma, los colegios deben integrar a su plan de estudios actividades que educaran para solucionar problemas cotidianos directamente relacionados con el entorno de los alumnos. Estos proyectos tienen la función de interrelacionar los conocimientos y habilidades adquiridos en las diferentes materias del currículo y promover el espíritu investigativo en los estudiantes.

Lastimosamente, en muchas instituciones educativas de Colombia la medida fue vista como una carga adicional y se hicieron pocos esfuerzos para integrarla adecuadamente al plan de estudios. Para cumplir con la norma, usualmente el profesor de ética o afines solía suplir la formación en educación sexual y de valores, y el maestro de ciencias terminaba siendo el único responsable de los Proyectos de Educación Ambiental (PRAE). Los proyectos no estaban teniendo los resultados esperados.

En el marco de una estrategia para mejorar la calidad educativa de la ciudad, la Secretaría de Educación de Medellín decidió hacerle frente a este tema y creó el programa Proyectos Pedagógicos Transversales, una iniciativa que asesora y acompaña a las escuelas para que formulen e implementen proyectos pedagógicos desde la transversalidad curricular. Con esto buscan que se construya conocimiento y se fomente el espíritu investigativo, y que los alumnos desarrollen competencias básicas ciudadanas mientras aprenden sobre preservar la vida y la salud como derechos fundamentales de sus comunidades.

¿Cómo lo hicieron?
La Secretaría de Educación de Medellín emprendió una tarea para transformar la forma en la que se implementaban estos proyectos y que se convirtieran en procesos indispensables para construir el conocimiento y desarrollar las competencias básicas y ciudadanas. Lo primero fue sensibilizar a las instituciones educativas sobre la importancia y beneficios de implementar estas prácticas y de hacer de ellas una labor de toda la comunidad escolar.

Actualmente el programa ha beneficiado a 12.850 personas entre estudiantes, maestros y padres de familia, y asesora a 42 planteles para que implementen sus proyectos de Educación Ambiental y Seguridad Vial desde la transversalidad curricular.

Este acompañamiento situado ofrece asesoría, apoyo y seguimiento continuo, para que los proyectos educativos transversales puedan ser incorporados al Proyecto Educativo Institucional de cada institución educativa y a todas sus dinámicas curriculares dándole prioridad a las problemáticas ambientales, de movilidad segura, y de sexualidad, entre otras.

Para esta labor, la Secretaría de Educación de Medellín ha contado con el apoyo de instituciones como la Fundación MAPFRE Internacional, la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (ANDI), las Secretarías de Medio Ambiente, la Secretaría de Movilidad y la Secretaría de Cultura Ciudadana del municipio de Medellín.

La clave es la investigación
La institución educativa San José Obrero, de San Antonio de Prado, es una de las que se ha acogido este programa. Los directivos del plantel han implementado proyectos pedagógicos transversales a través de su propuesta pedagógica llamada Colegio Parque-Aulas Sin Fronteras. El programa fomenta la investigación interdisciplinar y en contexto de los jóvenes de los grados de noveno a once con programas como Reciclar Paga, Sexualidad con Responsabilidad, Haciendo Memoria, la Montaña de los Peces, Colombia en escena, Las matemáticas del agua, Mariposario, Huertas Escolares, Seguridad Vial, entre otros.

Estos proyectos hacen parte de las clases normales de los alumnos y fueron diseñados a la medida del entorno físico que rodea al institución: un lugar con mucha naturaleza y espacios abiertos. Según Julio César Velásquez, rector de la institución, esto permite formar jóvenes capaces de comprender la importancia de la investigación, la innovación, el trabajo en equipo, y la solución de problemas en un mundo globalizado.

“Nuestro objetivo es que los estudiantes tengan una formación integral y en competencias. Todo el tema del proyecto apunta a la interdisciplinariedad y transversalidad, teniendo en cuenta las necesidades de nuestra comunidad. Lo que permite la educación es que los muchachos se sientan parte de su entorno y sepan que lo pueden transformar. Usan sus conocimientos y su investigación para comprometerse con lo que hay que mejorar en la ciudad”, afirma Velásquez.

En proyecto Las matemáticas del agua, por ejemplo, los estudiantes investigaron la comunidad, sus hábitos de consumo y las necesidades que no estaban siendo suplidas. Así establecieron la cantidad de agua potable que requería la zona. Gracias a esta investigación hoy día la vereda cuenta con un acueducto propio.

Para Velásquez, uno de los logros más grandes del programa es que los egresados han adquirido competencias que les permiten ingresar al sistema laborar como individuos reflexivos y conscientes del impacto que pueden generar en sus entornos inmediatos.

¿Quiere saber más?
Conozca otras exitosas experiencias educativas de Medellín y Antioquia durante la 1º Cumbre Nacional Educación: los territorios cuentan. Del 8 al 10 de octubre la capital de la montaña será un espacio de encuentro para la comunidad educativa donde se darán cita expertos nacionales e internacionales y líderes de los proyectos educativos más innovadores.