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ADOPCIÓN IGUALITARIA

2.135.000 firmas, pero un futuro muy incierto

El proyecto impulsado por la senadora Viviane Morales para hacer que los colombianos decidan si las parejas del mismo sexo pueden adoptar podría no llegar a ninguna parte.

2 de abril de 2016

La senadora Viviane Morales continuó esta semana su avanzada para que los colombianos decidan si las parejas del mismo sexo pueden o no adoptar menores. Este martes, radicó 2.135.000 firmas ante la Registraduría para tramitar un proyecto de ley en el Congreso que le permita llevar su iniciativa a la Corte Constitucional y luego a las urnas. Sin embargo, dado que el proceso de aprobación de un referendo en Colombia es largo y complejo, es probable que su propuesta no prospere.

La senadora ha argumentado desde que salió la sentencia de la Corte Constitucional, que esta parte de una idea equivocada según la cual la adopción es un derecho de los adultos y no es un mecanismo de protección para los niños. Para esto, propone adicionar un parágrafo al artículo 44 de la Constitución, donde se especifique que la adopción puede hacerse únicamente entre hombres y mujeres unidos entre sí en matrimonio o unión marital de hecho.

Si bien la iniciativa cuenta con el apoyo de sectores conservadores, su trámite por el Congreso será difícil pues hay sectores políticos que se oponen. Además, en la Corte Constitucional iría en contra de su propia jurisprudencia en torno a los principios de igualdad. Si, además, se considera que hasta el momento en el país ningún referendo de iniciativa parlamentaria ha tenido éxito en las urnas, porque el umbral necesario es muy alto –se requiere el 25 por ciento del censo electoral, es decir, casi 8 millones de votos– el referendo de Viviane podría quedarse en el papel.

A Morales, sin importar si se aprueba o no este referendo, le queda una ganancia política. La campaña la acerca a un nicho electoral que se opone al tema de la adopción igualitaria y que está de acuerdo con la propuesta de la senadora de trasladar un debate moral al campo jurídico. Por ahora, el trámite pasa al Congreso donde se definirá el futuro de la propuesta.