Canciller ‘cirujana’

Con pinzas, como en una cirugía, manejó la canciller María Ángela Holguín la crisis motivada por la propuesta del presidente ecuatoriano Rafael Correa para que los países del Alba no asistieran a la cumbre de Cartagena de abril, si Cuba no era invitada. Holguín tomó el toro por los cuernos y se reunió en La Habana con su colega Bruno Rodríguez y con el presidente Raúl Castro, quienes dejaron en claro que estarían interesados en estar en Cartagena, pero no en regresar al seno de la OEA ni en cumplir las condiciones de Estados Unidos. Días más tarde, tras una reunión en la isla, los representantes del Alba insistieron en su solidaridad con Cuba pero no en el boicot, y todo parece indicar que la canciller colombiana logró apaciguar los ánimos y salvar la reunión y, con ella, el prestigio internacional del gobierno colombiano.