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El lunes pasado Juan Manuel Santos sancionó la Ley de Desmovilizados y la prórroga de la ley de orden público. La norma que beneficia a los treinta y dos mil desmovilizados tuvo un trámite exprés en el Legislativo: solo tomó 16 días. Y el jueves dio a conocer la Ley de Primer Empleo, que busca que miles de desempleados jóvenes se vinculen al mercado laboral. Esta iniciativa fue propuesta por Rafael Pardo en la campaña presidencial. Luego, el gobierno le cogió la caña y junto a otros partidos mejoró la iniciativa. El resultado fue, según el presidente, el primer fruto de la Unidad Nacional. Estos son los puntos más importantes de las dos normas:

Ley de Desmovilizados

• Beneficia con la suspensión de las órdenes de captura –o ejecución de pena– a los desmovilizados que no tienen deudas pendientes con la Justicia.

• Compromete a los excombatientes a cumplir con el programa de la Alta Consejería Presidencial para la Reintegración y complementa las medidas que buscan la verdad, justicia y reparación de las víctimas.

Ley de Primer Empleo

• Beneficios para las pequeñas empresas que se constituyan y generen empleos formales. No pagarán matrícula mercantil, contribuciones parafiscales por sus trabajadores ni el impuesto de renta durante los dos primeros años.

• Beneficios para las empresas que vinculen a jóvenes menores de 28 años, mujeres mayores de 40 años que lleven por lo menos un año sin un contrato formal, madres cabeza de familia de los niveles 1 y 2 del Sisbén, reinsertados, discapacitados y desplazados.

• Los beneficios del Sisbén se seguirán otorgando hasta por un año a los colombianos que consigan un contrato de trabajo.