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¿Culpable o inocente?

Lo que aparentemente era un caso de violación a la intimidad, censurable desde todo punto de vista, parece ser una historia mucho más compleja.

4 de agosto de 2012

Lo que aparentemente era un caso de violación a la intimidad, censurable desde todo punto de vista, parece ser una historia mucho más compleja. La semana pasada circuló en los medios un video erótico de la viceministra de Juventud de Costa Rica, Karina Bolaños, en el que, en ropa interior sobre una cama, le habla a un hombre al que llama Pequis. Acto seguido, la presidenta Laura Chinchilla la destituyó de su cargo y en un comunicado explicó que tomó la decisión no por el video sino por dos denuncias por supuesto acoso que hay contra la exfuncionaria.

Bolaños habló con CNN en Español y aunque no se refirió a las denuncias, explicó que grabó el video en 2007 cuando estaba separada de su esposo, y que un experto en información se lo robó y la estaba extorsionando hace más de un año. El esposo, el diputado Víctor Hugo Víquez, fue hospitalizado de urgencia y según dijo la misma exviceministra, está muy afectado y no la está apoyando.

Como si fuera poco, La FM de RCN entrevistó a un supuesto amante de Bolaños, quien aseguró que fue su novio más de dos años, que él no es Pequis y que terminó la relación porque a pesar de que ella le aseguró que se había divorciado, descubrió que siempre estuvo casada. Fue este el hombre que la denunció por acoso porque ella no aceptó la ruptura y empezó a amenazarlo.

La denuncia contra Bolaños incluye medidas cautelares para que ella no se acerque al supuesto exnovio y es lo que motivó la decisión de la presidenta Chinchilla. Un video íntimo claramente no justifica el despido, pero sí es verdad que Bolaños incurrió en otro tipo de conductas que pudieron afectar su investidura como viceministra, deberá explicarlo ante la Justicia.