Delirios presidenciales

Además de casar peleas con todo el mundo, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ha ordenado leyes y proyectos que en el fondo no se sabe si encarnan su filosofía “bolivariana”.

Una orden del Consejo legislativo del Municipio Libertador suspendió esta semana el concierto de Alejandro Sanz, que estaba programado para el jueves 14 de febrero, “por no ser persona grata para el Presidente”. El cantante había dicho en una entrevista en 2004, que el presidente Chávez no le gustaba.

Esta semana el Ministerio de Salud de Venezuela prohibió a los siquiatras, sicólogos, universidades, centros de investigación y a los medios en general hablar de la salud mental del presidente Chávez e irrespetar la majestad del Estado.

El 30 de enero el presidente Chávez nombró una comisión de investigadores y científicos para que determine “los hechos históricos” relacionados con la muerte del Libertador Bolívar y determine sus causas. La comisión está presidida por el vicepresidente ejecutivo, Ramón Carrizales, y está conformada por nueve ministros, el Fiscal General y el presidente del Patrimonio Cultural.

Desde la madrugada del 9 de diciembre, los venezolanos duermen media hora más. Todos atrasaron sus relojes 30 minutos por orden presidencial. Chávez quiso que la hora fuera dispuesta por un meridiano que cruza por Caracas y no por el huso horario del Meridiano de Greenwich. Es uno de los tres países que tienen ese huso horario en el mundo.