José Ignacio Chávez

La lengua española está dolida. José Ignacio Chávez, uno de sus más grandes defensores, murió el pasado 18 de noviembre y nuestro español está de luto. Antes de dirigir durante casi 20 años el Instituto Caro y Cuervo en Bogotá, Chávez ya se había entregado al mundo de las letras desde muy joven: estudió en la Universidad de los Andes filosofía y letras y, posteriormente, se especializó en literatura en Florencia, Italia. También fue alumno de la Universidad Complutense y del Instituto de Cultura Iberoamericana, becado por la Oficina Internacional para el Estudio del Español (Ofines) y en Francia en el Instituto de Estudios del Tercer Mundo, Aix-en-Provence. Durante su gestión administrativa en el Caro y Cuervo, recibió los premios Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades, en 1999; el Bartolomé de las Casas, en 2001, y Elio Antonio de Nebrija, en 2002. Su grandiosa labor en el Instituto Caro y Cuervo fue reconocida, igualmente, por la Academia Colombiana de la Lengua, la Real Academia Española y la norteamericana de la Lengua Española. A comienzos de este año, Chávez había decidido retirarse del instituto y darse un descanso en Iguazú, en la frontera entre Argentina y Brasil, donde murió, a los 67 años.