¿QUE PASO CON?

El actor Leonard Nimoy se ganaba la vida interpretando pequeños papeles en películas de terror hasta que, a mediados de los 60, se le apareció la Virgen. El productor Gene Roddenberry le propuso interpretar a Spock, el rígido y siempre lógico primer oficial vulcano de la nave Enterprise, para la serie Viaje a las estrellas. Spock lo convirtió en una celebridad, pero también lo encasilló de manera tal que, desesperado, bautizó su primera autobiografía Yo no soy Spock. Tratando de borrar del público el recuerdo del alienígena con orejas puntiagudas, Nimoy se apartó del papel pero durante los 80 no pudo resistir la tentación económica de protagonizar el regreso de Viaje a las estrellas en sus versiones cinematográficas y, animado por el cariño de los fanáticos (y los dólares), aceptó participar en las multitudinarias convenciones de admiradores de la serie. Incursionó además en la dirección con películas como Tres hombres y un bebé, protagonizada por Tom Selleck (Magnum). Hoy tiene 72 años. Ha aprendido a manejar tan bien su 'pasado vulcano' que publicó una segunda autobiografía con un título que lo dice todo: Yo soy Spock.