Sida: sin avances

El mundo científico no tiene buenas noticias sobre posibles curas y vacunas contra el sida. Los intentos por encontrar una forma de resistencia han fracasado. “Llevamos 20 años diciendo que en 10 encontraremos la vacuna. ¿Realmente sucederá?”, dijo desilusionado el premio Nobel de Medicina David Baltimore durante una conferencia en Estados Unidos. Precisamente la semana pasada se comprobó la ineficacia del primer microbicida que impediría la transmisión del virus, el gel vaginal Carraguard creado por la ONG Population Council de Nueva York. Después de tres años de ensayos, y estando a punto de ser homologado, los científicos demostraron que pese a no ser contraproducente, tampoco garantiza que no se transmita el virus. Cambiar los genes de las células madres es la nueva ilusión. Según Baltimore, “es una posibilidad que apenas se ha estudiado en un primer nivel, pero la humanidad no puede rendirse”.