Tributo a Zidane

En el Mundial de Alemania 2006 el mundo vio a Zinedine Zidane, uno de los mejores jugadores de la época, cuando le dio un cabezazo en el pecho a Marco Materazzi en la final Francia-Italia. En su momento el hecho generó incluso parodias en internet y hasta se crearon demos de videojuegos donde se podía poner al jugador a dar cabezazos. El episodio fue recogido por el artista francés Adel Abdessemed, quien elaboró una monumental estatua de cinco metros de altura y varias toneladas de peso que se expone en la plaza de Beaubourg en París. La obra se titula Coup de Tete (cabezazo) y los visitantes de la plaza no dudan en tomarse fotos con ella. Aunque por lo general los monumentos conmemoran victorias, el artista parece celebrar una derrota, pues Zidane fue expulsado, fue su última aparición en un terreno de juego y Francia perdió la final. Sin embargo, la intención de Abdessemed, quien como Zidane es de origen argelino, es aprovechar un momento inolvidable para que el mediocampista francés siga presente en la memoria.