ENTREVISTA

“Queremos niños innovadores”

El colombiano Rodrigo Arboleda lidera el proyecto One laptop per child del MIT, que a pesar de su éxito en otros países, todavía no arranca en Colombia.

26 de febrero de 2011

SEMANA: ¿En qué consiste One laptop per child, del Massachusetts Institute of Technology?

RODRIGO ARBOLEDA:
Es un proyecto sin ánimo de lucro que busca que 100 millones de niños de primaria de países subdesarrollados salgan del oscurantismo y accedan a un computador especialmente diseñado para ellos, con conexión a la red.

SEMANA: ¿Lo que buscan es que tengan acceso a la tecnología?
 
R.A.:
No. Lo que queremos es utilizar la tecnología al servicio de la educación. Buscamos crear niños innovadores.

SEMANA: ¿Cuál es la diferencia entre un niño que recibe uno de sus computadores y otro que no?

R.A.: Un computador normal le sirve a un niño en bachillerato, pero para cambiar la manera de pensar de un niño de primaria le tenemos que enseñar a ‘aprender a aprender’, que es lo que nosotros hacemos. Este computador tiene aplicaciones pedagógicas que van orientadas a que el niño sea el arquitecto de su propio destino.

SEMANA: ¿De qué depende la aplicación del proyecto en cada país?
 
R.A.:
Es cuestión de que todas las fuerza se pongan de acuerdo. Esto no es solo un proyecto de gobierno.

SEMANA: ¿Hasta ahora cuáles han sido los logros del proyecto?
 
R.A.:
En Uruguay, todos los niños de primaria tienen un computador de los nuestros, que vale unos 200 dólares. Eso sí es una plan de equidad social.
 
SEMANA: ¿Por qué esto no ha sido posible en Colombia?

R.A.: Porque los ministerios de Educación, no solo el de Colombia, sino el de varios países latinoamericanos, han estado anquilosados. Es muy difícil que alguien venga a cambiarles el ‘caminao’.

SEMANA: ¿Siente que no es profeta en su tierra?
 
R.A.:
Sí. Hemos entregado dos millones de computadores a niños en todo el mundo, y me avergüenzo cuando digo que en Colombia solo hemos dado 8.000.

SEMANA: ¿Qué detractores tienen?

R.A.: Los que más nos han atacado son las grandes compañías de computadores, porque perciben que nuestro proyecto puede ser un riesgo en su mercado. Es como si los dueños de McDonald’s se pusieran bravos porque la FAO reparte comida en África.
 
SEMANA: Después de su reunión con el gobierno colombiano, ¿cómo ve el panorama?
 
R.A.: Si algún gobierno tiene la voluntad de hacerlo es este. El presidente Santos conoce el programa y lo puso en marcha en La Macarena en Bogotá. Ojalá todos siguieran el ejemplo de Itagüí, en donde ya pidieron 20.000 laptops, que llegarán a todos los estudiantes de primaria.

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