DESPLOMADO

EL RIGOR DE LA VIDA militar a que son sometidos los jóvenes bachilleres queda plasmado en esta gráfica de Carlos Vásquez, captada en el momento en que un patrullero es recogido por sus compañeros luego de caer abatido por el calor y el cansancio en plena ceremonia de graduación. Al parecer el clima también parece confabularse con la rígida disciplina del servicio militar obligatorio, que la semana anterior fue objeto de denuncias y controversias.