Enrique Diemecke es uno de los pocos que ya tuvieron la oportunidad de dirigir esta sinfonía en el continente americano. | Foto: Orquesta Filarmónica de Bogotá

CULTURA

Este fin de semana se estrena la Octava Sinfonía de Mahler en Bogotá

Es la primera vez que esta obra, conocida como la 'Sinfonía de los mil', se interpreta en Colombia. Más de cuatrocientos músicos estarán en escena.

14 de octubre de 2011

Después de dos intentos frustrados, los días 15 y 16 de octubre la Orquesta Filarmónica de Bogotá estrenará en Colombia una obra raras veces interpretada. Lo hará con ocasión de los cien años de la muerte de su compositor, Gustav Mahler, en un evento cultural sin precedentes que reunirá a más de cuatrocientos artistas bajo la batuta del maestro mexicano Enrique Diemecke, director titular de la orquesta y uno de los pocos que ya tuvieron la oportunidad de dirigir esta sinfonía en el continente americano.

Se trata de la Octava Sinfonía, estrenada el 12 de septiembre de 1910 en medio de una expectativa sin precedentes. El promotor del concierto presentó en esa oportunidad la obra como la Sinfonía de los mil, pues sostenía que esa fue la cantidad de músicos que participaron en esa primera interpretación. El compositor, sin embargo, siempre rechazó ese nombre. Quería que su obra trascendiera esta anécdota.

El hecho es que la Sinfonía de los mil es una de las composiciones de mayor impacto en la historia de la música sinfónica. Su interpretación y su puesta en escena la convierten en todo un reto para cualquier orquesta y coro del mundo. En Latinoamérica solo se ha hecho en Venezuela, Argentina y México.

A los 97 músicos que conforman la Filarmónica de Bogotá se sumarán 40 instrumentistas de la Sinfónica de Colombia y algunos supernumerarios. En el montaje también participarán el Coro de la Ópera, el Coro de Santa Cecilia, el Coro Infantil Crescendo y el Coro de la Fundación Música en los Templos. La obra requiere ocho solistas, de los cuales seis serán extranjeros y por Colombia estarán Valeriano Lanchas y Beatriz Mora.

Como Bogotá no cuenta con un escenario para un concierto de esta magnitud, el teatro Jorge Eliécer Gaitán tuvo que ser adaptado. Se utilizará toda la profundidad del escenario, casi hasta la pared de fondo. Para esto fue necesario construir un complemento que se extiende hasta la platea, lo que significó sacrificar algunas sillas. Además se levantaron unas estructuras de madera que completan la concha acústica, pues la que había no cubría todo el escenario.

El concierto contará con una difusión especial. Para quienes no puedan asistir al teatro habrá transmisión en directo por televisión y, por primera vez, por internet. Además, se instalarán dos pantallas gigantes de alta definición en el Parque de la 93 y en el Parque el Tintal.

La directora general de la Filarmónica, María Claudia Parias, está segura de que el concierto tendrá un impacto fuerte en los colombianos, pues la orquesta ha generado un público de Mahler muy importante. De hecho, la Octava es la única de las diez sinfonías de Gustav Mahler que le falta interpretar a la Filarmónica de Bogotá para completar el ciclo. "El trabajo de los últimos veinte años ha hecho que se cultive un gusto insólito por este compositor, que incluso a veces no se entiende en otras partes del mundo", dice.

Y la expectativa generada en torno al montaje es grande. Las boletas se agotaron en cuestión de días cuando se pusieron a la venta hace un mes.

El reto, sin duda, es grande tanto para el director y los músicos como para la parte administrativa. Los músicos vienen ensayando desde hace varios meses y son conscientes de lo que significa esta oportunidad. "Es una experiencia única en la vida, nos sentimos muy halagados de interpretar esta obra -asegura Luis Martín Niño, concertino de la Filarmónica-. Esta es una de esas oportunidades que uno tiene una sola vez en la vida y hay que aprovecharla. No se va a repetir". Una ocasión, en suma, que ningún aficionado a la música puede perderse.

La sinfonía se interpretará el sábado a las 4:00 p.m. y el domingo a las 12:00 m. en el teatro Jorge Eliécer Gaitán, bajo la dirección del maestro Enrique Arturo Diemecke, director titular de la Orquesta Filarmónica de Bogotá.