Alejandra Sánchez, directora del documental 'Cordero de Dios'.

ENTREVISTA

La pederastia no es un pecado de los sacerdotes, es un crimen: Alejandra Sánchez

Semana.com habló con Alejandra Sánchez, directora del documental mexicano 'Cordero de Dios', una historia real sobre pederastia que busca crear consciencia a través del cine.

John Harold Giraldo Herrera
25 de marzo de 2011

En los últimos años, la Iglesia Católica ha sido desprestigiada por los casos de pederastia denunciados en varios de los países que profesan su religión.  Las víctimas son en su mayoría niños, quienes tiempo después comprenden la magnitud de lo hecho por los sacerdotes y ven su vida debilitada.

En México se realizó un documental llamado 'Agnus Dei', que significa 'Cordero de Dios'. Esta producción cuenta la historia de los abusos de un sacerdote al que uno de sus sacristanes lo busca por qué quiere justificar el abuso del que fue víctima. El sacristán se llama Jesús Romero, es un hombre casado y espera encontrarse con el sacerdote para enfrentar cara a cara. El espectador del documental puede ver cómo se instalan cámaras en las aulas donde se forman los futuros sacerdotes, y resulta inquietanta conocer la manera cómo la sexualidad es un tema impregnado de pecado y abstención, en conclusión, visto como un daño para la fe.
 
Semana.com habló con la directora de 'Cordero de Dios', Alejandra Sánchez, quien vino a Colombia a estrenar su producción en el Festival Internacional de Cine celebrado en Cartagena.

Semana.com: ¿Por qué eligió el tema de la pederastia para su documental?

A.S.: Me gusta tocar temas que cuestionan, que provocan y de los que hay que hablar más allá de lo que ha hablado el periodismo. En el cine tienes la oportunidad de interpretar y de tomar una postura de manera libre, a diferencia del periodismo, se narra la historia que tú quieras contar. Me parece indispensable hablar del ejercicio de la sexualidad.

Semana.com: ¿Cómo concibe la pederastia?
 
A.S.: El tema de la pederastia no corresponde únicamente a cierta religión o a cierta clase social. Es una condición que acompaña a los seres humanos a lo largo de la historia. Es una temática poco entendida y estudiada, tanto que en algunos casos las víctimas se convierten después en victimarios o tienen una vida absolutamente quebrada por una infancia maltratada en ese sentido.
 
Semana.com: ¿Por qué le interesa hablar de la pederastia en la religión católica?
 
A.S: Porque creo que la iglesia católica se ha convertido en la institución que da dirección a la vida sexual, no solamente de los católicos, sino de los que no son católicos. Esa moral sexual se puede convertir en un daño y esa es la razón por la que me meto a este tema. Me gusta la contradicción en la que entra la Iglesia.

Semana.com: En el documental Jesús elige esa vocación pero después se arrepiente. En Colombia,  la escritora Carolina Sanín propone que los niños no asistan a ningún tipo de rituales para que después decidan lo que quieren sin ninguna presión. ¿Qué opina?

A.S.: Es una propuesta muy vanguardista. La película 'Cordero de Dios' es respetuosa con la fe, incluso respetuosa con la Iglesia como institución. Sólo abre una denuncia ante la sistemática actitud de estar ocultando crímenes. No son pecados, como ellos le llaman. Se debe hacer justicia ante este tipo de casos. Creo que lo correcto sería que el individuo creciera y decidiera sobre su religión, sobre su orientación sexual, etc.

Semana.com: México es un país muy religioso, ¿cree que el documental afecta negativamente a la religión católica que se profesa allí?

A.S.:
Sí va a causar conmoción, pero estoy confiada en que muchos católicos que vean el documental no se van a sentir agredidos, al contrario, van a cuestionar y entender que los sacerdotes son seres humanos. Este es un asunto de los representantes de Dios en la tierra, y eso no les quita ni un milímetro de humanidad.
 
Semana.com: ¿Considera que la castidad sigue siendo un hecho que la iglesia debiera seguir reivindicando, cuando los actos de pederastia demuestran lo contrario?

A.S.: Creo que le vendrá muy bien a la Iglesia Católica abrir el debate sobre asuntos de sexualidad en medio de la crisis por la que está pasando. Confío en que al interior de la Iglesia hay gente valiosa, inteligente, talentosa y sensible ante este tipo de hechos. Me he encontrado con sacerdotes así.

Semana.com: ¿Cuánto costó realizar el documental? ¿cuánto tiempo tardó hacerlo?

A.S.: El documental lo hice hace dos años y medio. En pesos mexicanos tiene un valor de unos cuatro millones. Lo realicé gracias a que conseguí un fondo en el Instituto Mexicano de Cinematografía. Después tuve la suerte de conseguir la coproducción francesa Karol Solis, que es la productora de 'La vida loca'. Eso colocó al documental en una plataforma de despegue en escenarios europeos. También está involucrada la Universidad Autónoma de la ciudad de México.

Semana.com: Ante la emisión del documental, ¿hay alguna reacción de la Iglesia en México?
 
A.S.: Con este documental hice un preestreno en la Universidad donde trabajo, estuvo invitado Jesús Romero Colin, el joven que es protagonista.  Sospecho que después de que se emitió un artículo en la prensa, el cura se enteró y luego le llegó un anónimo bastante desagradable a Jesús.
 
Semana.com: ¿Cuáles recursos narrativos usó en el documental? 

A.S.:
 La pantalla cinematográfica debe decir cosas verdaderas, independientemente si es un caso de la vida real o no. En este caso el reto era hacer un documental con toda una estructura de ficción, dramáticamente hablando, y con la libertad de proponerle al joven Jesús Romero tareas escénicas y puestas en cámara que me parecían necesarias para narrar la historia.
 
Semana.com: ¿Cómo argumenta la historia?
 
A.S.: La historia es un viaje de entendimiento de lo que le pasa al personaje y un viaje de búsqueda para confrontar a su agresor y de alguna manera liberar su dolor. Cuando se habla de pederastia las víctimas quedan muy trastornadas, pasan por una especie de síndrome de Estocolmo, hay una especie de enamoramiento y odio ante sus victimarios.

Semana.com: 'Agnus Dei', ¿de dónde viene este título?
 
A.S.: Se debe a la figura del cordero de Dios.  Es la figura de la inocencia, de lo pequeño, de lo vulnerable y por eso me pareció que era un título correcto para la película.

Semana.com: ¿Qué espera de 'Cordero de Dios'?

A.S.:
La utopía es esa. Abrir espacios donde se discuta sobre el ejercicio de la sexualidad y se asuma que ocurren estos lamentables abusos. También se trata de que quienes han sido víctimas encuentren caminos para trabajar sobre su dolor y no sé si superarlo pero por lo menos, entenderlo y tener un poco más de paz.