Especiales Semana

523 Semanas

En este número, SEMANA cumple 10 años de vida. Después de una década, relevo en la Dirección de la revista.

8 de junio de 1992

HACE EXACTAMENTE 10 AÑOS UN GRUPO de personas que creían que en Colombia había un vacío informativo decidieron meterse en lo que aquí, históricamente, había sido considerado un imposible: crear una revista influyente de circulación nacional. En aquel momento parecía una quijotada, ya que Colombia tiene el récord de ser uno de los países que ha tenido simultáneamente el mayor número de intentos y el mayor número de fracasos en materia de revistas. Como el experimento más satisfactorio hasta la fecha había sido el de la revista SEMANA, fundada por Alberto Lleras en 1946, se pensó que sería conveniente evocar el prestigio de ese nombre para darle una señal al país sobre la seriedad de la publicación que se buscaba sacar adelante .
Gracias a la generosidad del expresidente y de Alberto Zalamea la utilización de dicho nombre fue posible.
SEMANA, en su primera etapa, había durado 13 años. Aunque se asocia hoy con ese grande del periodismo que fue Alberto Lleras Camargo, curiosamente él no la dirigió sino un año. No es exagerado afirmar que todos los ejemplares vieron la luz pública bajo su dirección son auténticas piezas maestras de periodismo. Después del ex presidente pasaron muchos directores. No menos de 10 en los 13 años de vida. Muchos de ellos con un talento enorme, como Juan Lozano y Lozano o Alberto Salamea. Sin embargo la rotación en la dirección del semanario fue tan rápida que le fue dando a la revista identidades diferentes que afectaron su continuidad a ojos del lector. A este fenómeno algunos conocedores le atribuyen su declinación y su imposibilidad para sobrevivir.
Por esto, en este segundo intento de sacar a SEMANA adelante, se consideró prioritario garantizar el mayor grado de estabilidad y continuidad editoriales. Así se hizo, y dura primera década de vida la revista la Dirección estuvo a cargo de una sola persona: Felipe López Caballero quien tuvo la fortuna de contar durante la etapa inicial de este experimento con la asesoría de ese maestro del periodismo que es Plinio Apuleyo Mendoza. Durante ese lapso se vivieron la vicisitudes propias de la inevitable falta de experiencia inicial. El bajo nivel de lectura de los colombianos, el escepticismo de los anunciadores frente a la posibilidad de crear un nuevo medio de comunicación independiente, en un país donde por tradición éstos suelen estar en manos de los grupos políticos o económicos.
Todos estos obstáculos, afortunadamente, pudieron ser superados y hoy SEMANA es considerada por sus lectores como un medio serio y confiable.
Consolidadas todas las metas iniciales de la revista, es necesario ahora pensar en el futuro, su crecimiento, los nuevos servicios que presta y los proyectos que se están gestando requieren de una reestructuración de fondo en el manejo de SEMANA. Por esto se ha decidido que el cumplimiento de la primera década coincida con una organización jerárquica diferente.
Felipe López asume las funciones de presidente de PUBLICACIONES SEMANA que está desarrollando nuevos proyectos editoriales. La Dirección de la revista pasará a ser compartida por dos personas: Roberto Pombo y Mauricio Vargas. No es necesario presentarlos, pues es poco lo que habría que decir sobre ellos que nuestros lectores no sepan. Baste recordar sólo dos cosas.
Mauricio representa la primera etapa en la vida de esta revista y Roberto la más reciente. Tal vez más importante, se trata de dos personas menores de 35 años que representan a la generación que habrá de marcar la pauta en cuestión de periodismo de aquí al final del siglo.
Para nosotros, este 12 de mayo y toda esta semana son motivo de una gran celebración. Pero más importante que las fiestas sociales y los agasajos por la década cumplida, es el poder compartir esta ocasión con nuestros lectores. Son ellos ustedes quienes han permitido que SEMANA sea lo que es hoy, y por eso queremos conmemorar juntos esta ocasión a través de este ejemplar de aniversario. Este número es una mirada rápida a nuestro pasado periodístico y un retrato de nuestra realidad actual. El aniversario nos hace sentir viejos y jóvenes a la vez.
Creemos que de alguna manera hemos alcanzado la mayoría de edad, pero a la vez sabemos que es mucho más lo que nos falta por andar que lo que llevamos recorrido.