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Heine Sorge Reina llegó discretamente a Cartagena. Lo hizo con su computador portátil debajo del brazo y cientos de documentos, la mayoría de ellos manuales del buen derecho, con el fin de terminar su investigación sobre los pormenores de las fiestas novembrinas. Aceptó invitación a cuanto coctel hubo en La Heroica. Aceptó cuanto homenaje de desagravio se programó a su nombre. Aceptó ser hijo adoptivo de estas tierras del Caribe. Y en todos esos actos solemnes leyó el mismo discurso en el que defendió con ahínco la imparcialidad de sus febriles investigaciones y les recordó a todos que serían exhaustivamente investigados bajo su lupa de la justicia moderna. Este experimentado sabueso finalizó su informe anual y antes de partir de La Heroica, en medio de la banda papayera que lo acompañó al avión, entregó su informe final. Estas son sus principales conclusiones:1. Avaló el nombramiento de Raimundo Angulo Pizarro como nuevo presidente del Concurso de Belleza y ordenó que este cargo será vitalicio y sólo podrá ser ocupado por los descendientes del presidente.2. Decretó que Patricia Moreno será la chaperona oficial hasta el siglo XXII, y en caso de omisión o abandono sólo será reemplazada por una chaperona que lleve su mismo nombre.3. Dejó en claro que mientras el ex ministro Rodrigo Pardo continúe en su labor de reportero de reinas, su investigación en la Fiscalía se mantendrá congelada hasta nueva orden. Le recomendó al ex canciller que aquí en Cartagena de pronto sí se entera cómo se financia a una candidata departamental.4. Decretó que los 'cuentachistes' no podrán volver a cubrir el certamen de la belleza. Este trabajo será exclusivo de ex reinas y ex ministros, quienes por encanto se convierten en expertos en canutillos y lentejuelas. 5. Ordenó que a partir del próximo año la sala de peluqueros será administrada por los mejores jardineros del Hotel Hilton. Los Murillo y los Barraza se pueden marchar con sus cuentos chinos para otra parte a descrestar calentanos.6. Por último, pidió a las autoridades cartageneras que, junto a la torre del reloj, se erija un busto a su nombre pues en Chimá ya no hay sitio para uno más. Ordénese y cúmplase...