Especiales Semana

Ahorre en línea

Aproveche al máximo las opciones de inversión que ofrece Internet para poner a rentar la plata sin moverse de su casa.

26 de enero de 2004

Internet ha revolucionado la manera de invertir. Hoy en día es posible comprar acciones de la bolsa de Nueva York desde su casa, vender bonos en el mercado de Tokio en tiempo real, cambiar pesos por dólares e incluso invertir en proyectos de finca raíz en Madagascar. Todo lo que necesita es un computador con acceso a la red.

Internet ofrece la más amplia variedad de opciones de inversión que existen en la actualidad, con sus respectivos riesgos, ganancias y costos. El principal atractivo para los inversionistas, además de la inmediatez, es la gran cantidad de información que pone a su disposición: gráficos, estadísticas, análisis de valores, noticias de agencias. Todo un mundo de datos para que cada quien pueda encontrar el nivel de detalle que necesita, según su interés y disponibilidad de dinero.

Por ejemplo, para realizar operaciones en bolsa hay portales financieros especializados que siguen de cerca la evolución de las compañías y proporcionan cifras sobre estados financieros, productos y principales competidores. Algunos de ellos ofrecen el servicio de corredores en línea para las personas que no se atreven a invertir directamente en la bolsa, por un valor de 15 dólares en adelante. La comisión es más barata comparada con la que cobran los intermediarios de los canales tradicionales.

A escala mundial, los más famosos sitios para invertir por Internet son Charles Schwab, Fidelity Investments,

E-Trade, Datek, TD Waterhouse y Patagon (ver recuadro). A través de ellos, usted puede abrir una cuenta de ahorros en Estados Unidos con sólo 10 dólares, o realizar inversiones en la China por menos de un millón de pesos.

En Colombia, junto con el desarrollo de la banca virtual, las entidades financieras han venido trabajando en la creación de herramientas electrónicas de inversión. En los últimos dos años, los bancos han pasado de utilizar Internet como un simple canal para pagar servicios públicos y hacer traslados entre cuentas, a permitir la realización de inversiones en línea y dar servicios personalizados, según el perfil de cada usuario.

Por ejemplo, hoy es posible abrir una cuenta de ahorros en un banco sin tener que ir a una sucursal financiera, como es el caso de Bancolombia, que permite crear cuentas a través de su portal de Internet.

El Citibank, por su parte, ofrece inversiones virtuales como los certificados de depósito a término (CDT) y la compra de divisas en moneda extranjera. En el caso de los CDT, el cliente escoge el tiempo que quiere poner a rentar la plata y al vencerse el plazo recibe electrónicamente los rendimientos en su cuenta.

El Banco Santander permite la conexión de todos sus servicios para que la gente pueda mover la plata de la cuenta de ahorros a la del fondo de pensiones y ponerla a rendir en inversiones en el exterior.

A futuro se espera que se sofistiquen los servicios para la aprobación de créditos en línea, la posibilidad de hacer inversiones corporativas y la venta electrónica de productos financieros como derivados y forwards.

Aunque la cultura de invertir por Internet apenas está naciendo, no cabe duda de que será una práctica generalizada a la vuelta de dos o tres años. Sin embargo, si usted no es un avezado inversionista de valores tenga cuidado a la hora de meterse a la red para hacer negocios. Se necesita más que tener una conexión para aventurarse a hacer estas inversiones que requieren conocimiento del mercado. Si usted se siente seguro, súbase al tren de los que invierten alrededor del mundo, desde la comodidad de su casa.