Especiales Semana

ANTIOQUIA

2 de mayo de 1994

POR UNA MAYOR CALIDAD DE VIDA
CUANDO DE EFICIENCIA SE HABLA, TANto en Colombia como en el resto de Latinoamérica Empresas Públicas de Medellín (EEPP) es un ejemplo de mención obligada. La revista América Economía la ubicó el año pasado como la cuarta empresa en patrimonio y la décima en utilidades por ventas dentro del listado de las 500 empresas más importantes de la región. Y, hace tres semanas, la Procuraduría la comparó con 14 empresas de servicios en el país y la señaló como el mejor ejemplo de atención al usuario.
¿Pero cuáles son las claves de su éxito? ¿Qué convierte a esta empresa con 6.100 empleados y 29 sedes en el Valle de Aburrá en un caso tan especial? Para averiguarlo SEMANA dialogó con su gerente, Diego Uribe Uribe, y sus opiniones, sumadas a algunos novedosos proyectos, están presentes en este artículo.
El buen manejo que reciben los servicios públicos en Medellín, traducido en las coberturas que aparecen en el recuadro, se debe entre otros aspectos, de acuerdo con las palabras de Diego Uribe, a la autonomía de la empresa. Desde hace 38 años funciona con patrimonio propio y manejada por gerentes con énfasis en la planeación y el manejo cuidadoso de todos los costos.
"Aqui hay toda una cultura del mantenimiento -sostiene Diego Uribe ilustrando este punto-. La hidroeléctrica Rio Grande 1, por ejemplo, lleva 40 años funcionando con toda su capacidad de generación de energía. Creo que este es un caso único en el continente y es posible gracias a nuestro riguroso programa de mantenimiento de plantas. No tenemos inconveniente en detener una planta que funciona en perfecto estado para revisarla".

DESARROLLO HUMANO
Otra clave del éxito está en lo que el gerente denomina una "impresionante perfilería" y que se traduce en la selección de las personas que ingresan a la empresa de acuerdo con las necesidades claramente establecidas de cada cargo. La Dirección de Relaciones Industriales selecciona la gente con este criterio desde antes de la creación de la carrera administrativa en el país.
A lo anterior se añaden planes de capacitación para los obreros, los empleados y los ingenieros con cursos diseñados cuidadosamente año tras año en el Departamento de Desarrollo Humano de la misma dirección. En 1993 fueron 7.500 eventos de este tipo. Eso implica que cada persona asistió a 1.3 eventos de capacitación en el año. Y adicionalmente, los ingenieros viajan con frecuencia al exterior para conocer lo último en tecnologías de punta.
Empresas Públicas de Medellín está presente en un gran porcentaje de los seminarios sobre prestación de servicios de acueducto, alcantarillado, energía y telecomunicaciones ofrecidos en todo el mundo y nunca falta, por poner solo un ejemplo, al Congreso Mundial de Telecomunicaciones.
Desde luego, la consecuencia lógica de todo lo señalado es un profundo sentido de pertenencia del personal a la empresa. La estabilidad laboral de quienes trabajan en cargos operativos está calculada en 11 años promedio y quienes ocupan puestos en el segundo y el tercer nivel gerencial se mantienen dentro de la empresa un promedio de 15 años.
Pero el sentido de pertenencia no se queda entre los muros de las numerosas sedes de la entidad. En Medellín ha hecho carrera una leyenda según la cual todo paisa que encuentra abandonada en la calle una factura de Empresas Públicas la recoge y la paga.
Exagerado o no, lo cierto es que la gente de la ciudad y los 12 municipios a donde llega la empresa se mantiene informada sobre sus más importantes adelantos en materia de servicios e invita a los turistas a conocerlos.

EL EDIFICIO INTELIGENTE
Actualmente, el más mencionado de esos adelantos es la construcción del Edificio Inteligente, sede que concentrará a partir de septiembre de 1995 a 2.200 empleados de Empresas Públicas y se espera que funcione con tres mil a comienzos del siguiente siglo.
La obra tiene un costo de 100 millones de dólares. Serán 124 mil metros cuadrados y 11 pisos con las mayores especificaciones en seguridad, comunicaciones e informática de Latinoamérica.
Habrá una central de control para toda la edificación manejada por sólo cinco personas y a todos los espacios se ingresará electrónicamente por el sistema de tarjetas. Con el tiempo, se espera contar con un computador por cada dos empleados pero desde el inicio cada teléfono estará conectado por fibra óptica a las terminales. En un solo sistema de informática estarán concentrados todos los servicios públicos de Medellín: acueducto y alcantarillado, energía, telecomunicaciones y desde ahora también gas domiciliario.

LLEGA EL GAS
La masificación del gas natural o gas metano equivale en el Valle de Aburrá a 250 megavatios de energía. Con la colaboración del sector privado se inició en febrero la construcción del gasoducto que transportará de Puerto Berrío al Valle de Aburrá el combustible. La distribución domiciliaria servirá para que el gas se utilice en el calentamiento del agua y la cocción de los alimentos ahorrando un 30 por ciento en la factura de energía en promedio. Esta distribución quedó por completo en manos de Empresas Públicas y su espina dorsal es un gran tubo paralelo al río Medellín. Tanto esta obra como la anterior estarán listas en 20 meses.
Desde hace dos años la empresa adelanta un plan piloto de educación para el uso del servicio (con gas propano) en unos 30 edificios de los seis estratos de la capital antioqueña. El servicio yu se está facturando allí y se espera que para iniciar el siguiente milenio cuente con 500 mil usuarios. Por esto, se adelanta también una campaña con los constructores, en la que interviene Camacol, para que entiendan la necesidad de hacer las instalaciones pertinentes.

MAS SERVICIOS
Hablar de Empresas Públicas de Medellín es hablar del nivel de vida de los habitantes del Valle de Aburrá haciendo referencia a todo lo anterior y a otras características que hacen de esta entidad un ejemplo muy singular en manejo de servicios públicos.
Puede decirse, también, para tomar sólo un ejemplo más, de su red telefónica digitalizada que ya alcanza el 60 por ciento de cobertura y a su promedio de daños, pues una línea se avería cada 24 meses. Y además cabe mencionar el saneamiento del río Medellín con tres plantas de descontaminación. Una terminada y dos en construcción, la de Niquía que estará lista en 1999 y la de Girardota que funcionará en el 2005.
Pero tal vez, todo lo anterior puede resumirse en las palabras de Luis Fernando Múnera, director de planeación de EEP.: "La empresa es de todos los paisas. Nosotros tenemos un compromiso con casi 40 años de excelente servicio y eso es lo que nos impulsa a seguir adelante".-