Especiales Semana

De Maloka para Bogotá

El primer centro interactivo de ciencia y tecnología del país celebra cinco años de funcionamiento.

30 de noviembre de 2003

A palabras necias oídos sordos". Este refrán se acomoda perfectamente al espíritu de Nohora Elizabeth Hoyos. Si ella le hubiera hecho caso a todas las personas que le dijeron que hacer un centro interactivo de ciencia y tecnología en Colombia era imposible, hoy no existiría Maloka.

En el último lustro la ciudad se ha ido redefiniendo y las imágenes de Monserrate, La Candelaria y la Plaza de Bolívar ya no son suficientes para explicar lo que está sucediendo en una urbe de más de siete millones de habitantes que cada día evoluciona y se transforma. Prueba de este cambio es Maloka, que cinco años después de su creación ha dejado de ser simplemente un espacio de interacción y aprendizaje para convertirse en el símbolo de una capital moderna y con ansias de desarrollo.

A simple vista se trata de un museo de tercera generación cuya ideología se fundamenta en que las personas aprendan conceptos sobre el universo, el ser humano, la ciudad, el medio ambiente, las telecomunicaciones y la tecnología a través de la exploración directa y sensorial.

Pero más allá de ser una construcción de 20.000 metros cuadrados con nueve salas de exposiciones, 250 módulos interactivos, la mediateka y un cine domo, Maloka significa el éxito en un territorio en donde otros proyectos han fracasado, pues ha logrado compaginar el trabajo de los sectores público y privado en pos de un fin común: acercar el estudio de la ciencia y la tecnología a toda la sociedad sin importar nivel educativo, clase social, edad, sexo o recursos económicos. Para 2004 se espera reunir los recursos suficientes para iniciar la construcción de la segunda etapa del centro que contará con un biodomo sobre la biodiversidad en Colombia.

Maloka es un proyecto autosostenible y la idea es que en un par de años pueda convertirse en una franquicia colombiana de exportación, como señala su directora Nohora Elizabeth Hoyos. En el momento el proyecto de 'Maloka viajera', una exposición itinerante con lo mejor de la muestra que se exhibe en Bogotá, se encuentra en Quito y más de 12.000 ecuatorianos han podido disfrutar de esta presentación de puro talento colombiano.