Especiales Semana

DIA DE LA MADRE

29 de mayo de 1989

MADRES Y AMIGAS
Ser madre no es fácil. A criar se aprende rapido, es cierto: por lo general el primer hijo es una especie de conejillo de indias, y los demas, sin restarle merito ni dolores de cabeza a la labor, son casi una repetición. Tetero a las 6 de la mañana, pañales media hora despues, pediatra cada 15 días, compota de manzana a las 12, cremita para que no se irrite, y un etcetera interminable que llena las 24 horas del día, todos los días.

Lo que no es tan imitable es la educación tampoco la relación interpersonal entre madre e hijo, a lo largo de las dificiles etapas de la niñez y de la adolescencia, con todo y la llamada epoca de la "caca de gato" a bordo. Cada niño y cada muchacho es diferente, y para cada uno hay un tratamiento y una manera de enfrentar la relación.

Lo cierto es que los tiempos pasan, y cada dia es mas aterradora la diferencia entre las generaciones. La frontera entre padres e hijos cada vez se aleja mas de los extremos, y por lo tanto cada vez separa mas a unos y a otros.

De manera que si ser madre es difícil hoy en día, dentro de 10 o 20 años será peor.

Las mamás que hoy se aterran con los gritos delirantes de las niñas por los ídolos del rock en español, son del mismo corte de las que ayer se aterraban con las minitecas. Lo mas grave es que quienes no han logrado entender cambios aparentemente normales como estos, definitivamente no podrán estar en la onda de los hijos del 2000 y de ahi para adelante. Y lo peor es que en la mayoria de los casos, por no querer entender los primeros sintomas del choque generacional, se deja de conocer la verdadera esencia del asunto.

¿Cual es la solución? Posiblemente darle un viraje a la concepción tradicional de madre hasta convertirla en la amiga de sus hijos. Amiga hasta el punto de compartir rumbas. Amiga hasta el punto de volverse aquella confidente a la que se le cuentan esas cosas que hoy no se le cuentan a los padres.

Una amiga que es capaz de escucharlo todo, sin escandalizarse, aunque -por supuestono tenga que aceptarlo todo. Marca la pauta, ejemplifica, analiza las situaciones y ofrece un punto de vista sustentado. Un punto de vista que puede asimilarse por completo, tomarse parcialmente o, tal vez, desecharse. Lo importante es que la decisión del hijo, cualquiera que sea, tambien aparezca sustentada. Y sustentada no como para convencer al padre o a la madre, sino para que lo convenza a el mismo y demuestre ser el resultado lógico de una forma de pensar equilibrada y acorde con su personalidad.

Para esto, claro esta, la relación debe comenzar desde el principio.
Incluso desde antes de que ese amigo en potencia da su primera luz. Si las prácticas de estimulacion temprana han arrojado un resultado positivo en renglones como el de la inteligencia, algo similar puede lograrse en materia de educacion de la personalidad y educacion de las relaciones padre-hijo.

"El método de ser amigos con los hijos no funciona, en la mayoría de los casos, porque comienza tarde", asegura la pedagoga Denise Giraud, "o sencillamente porque los padres quieren entablar una relación aparentemente amigable, pero en la que ellos siempre tienen la última palabra; en la que lo hijos deben respetar el pensamiento de sus padres hasta las consecuencias finales, pero los padres no quieren escuchar las razones de sus hijos. Lo cierto es que los verdaderos amigos siempre se dicen las verdades, siempre las cosas como son. Asi, un padre amigo de su hijo, podria decirle a este lo que el considera mal hecho, sin que se arme una revolucion. Pero hay que insistir en que el metodo debe aplicarse desde el comienzo. Los amigos se cuentan las cosas, y el papá o la mamá pueden llegar del trabajo a contarle a su hijo las experiencias del día aunque el niño apenas tenga dos años: posiblemente el pequeño no da una solucion a los problemas financieros, pero con seguridad se dedicara a consentir a sus padres.

La clave es, por lo tanto, la amistad. Y una de las bases de la amistad es el conocimiento. Si el padre o la madre conocen suficiente acerca del mundo que rodea a su hijo, posiblemente entiendan el porque de las reacciones y el porque de los factores que muchas veces se consideran como un choque generacional. -